Monterrey.- Si nació en el club de enfrente, ni se acuerda. Aldo de Nigris dice tener “un corazón azul y blanco”. La entrega, el cariño por el club y el trabajo duro, son elementos clave en su carrera con Rayados, donde logró ganarlo todo y tiene claro que quiere seguir trascendiendo colectivamente.
Fue parte de la época dorada del equipo en su primera etapa como jugador, en donde levantó dos títulos de Liga MX, una de Interliga y tres de Ligas de Campeones de la Concacaf.
Luego de su retiro, llegó junto con Antonio Mohamed siendo su auxiliar técnico, y ganaron el Apertura 2019 ante América. Confiesa para ABC Noticias que esto fue como “un sueño que se hizo realidad muy rápido”, aunque espera seguir aportando al club que el próximo domingo cumplirá su 75 aniversario.
Y es que su camino no fue nada fácil, pues según relató, estuvo en Tercera División con Monterrey y luego fue dado de baja. La vida lo llevó a debutar con Tigres, que curiosamente es el acérrimo rival.
Después militó por Veracruz y Necaxa, hasta que llegó a su meta: Rayados.
¿Alguna vez imaginaste lograr tanto en dos fases distintas con este equipo?
“Difícilmente puedes imaginar algo tan grande, tanto éxito en un club. Sí soñé con ser profesional de futbol, con llegar a debutar en un equipo. Soñé con hacer goles en Monterrey, que la gente coreara mi nombre, era algo que tenía muy en la mente como delantero.
“Una cosa fue llevando a otra. El destino me mandó para otro lado y después tuve que tocar piedra para después lograr que el destino se acomodara y así fue, llegó la opción de Monterrey”, responde.
La carta de presentación fue complicada, pues tras haber vestido los colores del contrario no era fácil de olvidar, pero con goles y entrega, logró que la afición terminara por alabarlo y considerarlo como una leyenda del club.
“Me perdonaron muy rápido (los aficionados), eso habla de una afición que nos quiere a los De Nigris, que es noble y que si ve que te partes el alma en el campo por el escudo te va a respaldar y eso fue lo que más me motivó para seguir. Después me fueron llegando los éxitos, con mis compañeros que me ayudaron mucho”, añadió.
Aldo no es el único en su familia que fue un referente, pues primero fue su hermano Antonio (Q.E.P.D.), quien hizo vibrar a los regiomontanos con su talento futbolístico vistiendo los colores de La Pandilla. Es al “Tano” a quien el exdelantero le estará siempre agradecido por las enseñanzas dentro del terreno de juego, pero también en la vida, como persona.
Ahora, su reto y el del equipo a cargo de Antonio Mohamed, es pensar en el Bicampeonato de Liga MX (tras la cancelación del Clausura 2020) y con conquistar la Copa MX (final por disputarse) en el marco del 75 aniversario del Monterrey.
“Felicidades. Agradecido con la institución que me hizo crecer muchísimo en todos los aspectos”, concluyó.