Monterrey.- En apenas un año, todo cambió para el Club de Futbol Monterrey y sus aficionados, que pasaron del enojo y frustración a ilusionarse con el paso que vive Rayados en el presente torneo.
Fue el pasado 21 de febrero de 2022 que el distanciamiento entre seguidores y el club alcanzó su punto más alto, cuando, a las afueras de El Barrial, un grupo de aficionados encaró a los jugadores del club por el mal arranque de torneo que llevaba el equipo en ese momento y el fracaso en el Mundial de Clubes.
Ese día colgaron mantas en contra de jugadores como Rodolfo Pizarro y Vincent Janssen, gritaron consignas contra directivos y hasta lanzaron huevos a varios vehículos en una escena que le dio la vuelta a México.
Un año después, los jugadores criticados se fueron, el entrenador Javier Aguirre dejó el equipo, Duilio Davino ya no está en la directiva y José González Ornelas prácticamente ha dejado la presidencia del Consejo de Administración del Club.
El presente de los Rayados es prometedor, no solo en la cancha, sino por haber regresado la comunión con sus aficionados, quienes han vuelto a llenar el Estadio BBVA y registra las entradas más altas de la liga.
Monterrey es líder general del certamen con 21 puntos, producto de siete triunfos al hilo y el próximo lunes ante León buscarán igualar una marca de ocho victorias, que no logran desde hace 60 años.
Con los buenos resultados en el campo y dinámicas para acercar a su afición al equipo, las heridas de hace un año hoy parecen estar sanadas y olvidadas.
La inseguridad y los miedos de los seguidores albiazules fueron cambiados por la ilusión de ver a un equipo peleando los primeros puestos y con el regreso de Victor Manuel Vucetuch, el entrenador que guió al club a su epoca dorada hace más de 10 años.