Coahuila.- Jennifer "N", mujer detenida tras atropellar a varios aficionados de Rayados el pasado 21 de enero, dio su versión de lo ocurrido esa noche a las afueras del estadio TSM, donde una madre de familia perdió la vida.
La información fue compartida por el medio El Siglo de Torreón.
De acuerdo al medio antes citado, en la audiencia estuvo el padre de la responsable y un familiar de cada uno de los lesionados.
Jennifer señaló que ese domingo acudió al partido entre Santos Laguna y los Rayados del Monterrey en compañía de su esposo César Uriel. Al término del encuentro, los seguidores del Monterrey los insultaron por lo que su pareja detuvo la camioneta y se bajó.
"Quedando arriba en la camioneta Edith y yo (Jennifer), por lo que me cambié al lugar del conductor y di vuelta en "U" para ir por mi esposo, cuando aceleré la camioneta se me movió de un lado a otro y me asusté y me fui contra un taxi y vi algo blanco.
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"Sentí el impacto con el taxi y ya no recuerdo más, después alguien abrió la puerta y me bajaron y me golpearon, corrí con los de seguridad del estadio y posteriormente con los municipales, les dije que me llevaran al lugar que era mi camioneta, pero ellos me dijeron que, si quería, me podían acercar pero que me podían volver a golpear, nunca me informaron que estaba detenida", expresó y se negó a responder a los cuestionamientos del Ministerio Público.
En la audiencia se presentaron a declarar, según El Siglo de Torreón, Edith, su novio Alejandro y Julio César, agente de Tránsito y Vialidad de Torreón, quienes viajaban en la caja de la camioneta.
En sus declaraciones, los tres testigos coincidieron en que todos los aficionados del Monterrey les gritaron insultos y lanzaron piedras, por lo que César detuvo su marcha para posteriormente intercambiar golpes con los seguidores regios.
La defensa de la acusada presentó un peritaje externo al de la Fiscalía de Coahuila donde señala que el estallido de la bolsa de aire podría haber desorientado a Jennifer y ocasionado que perdiera el control del volante tras impactarse con el taxi.
Por su parte, el Agente del Ministerio Público refirió que Jennifer al momento del accidente manejaba en segundo grado de ebriedad. Además, testigos del hecho señalaron que el esposo de la acusada les gritó "¡sobres de ellos!".
Seguirá en prisión en Coahuila
Finalmente el juez de control reiteró la medida de prisión preventiva justificada para Jennifer ya que esta no pudo ser modificada como lo solicitó la defensa, pues se presume que la imputada actuó con dolo.
La mujer se encuentra recluida en las instalaciones del Cereso de San Pedro. La audiencia intermedia está programada para el día 29 de mayo del 2024.