Nueva Orleans.- Cuando DeAndre Hopkins tenía 10 años, su mamá fue atacada con ácido y quedó ciega, algo que cambió para siempre la vida del ahora receptor de los Chiefs de Kansas City.
Era sólo un niño, cuando su mamá, Sabrina Greenlee, y su novio sostuvieron una discusión afuera de un departamento en el que el hombre se encontraba acompañado de otra mujer.
De un momento a otro, del departamento salió Savannah Grant, señalada como la agresora, y le arrojó ácido directo al rostro, lo que le provocó quemaduras en la piel y ceguera.
Aunque Grant fue sentenciada a 20 años de prisión por asalto e intento de homicidio, a partir de ese momento, DeAndre y sus hermanos tuvieron que luchar para salir adelante como familia.
Hopkins no dejó de jugar futbol americano, pero con tal de permanecer cerca de su mamá, decidió permanecer en su ciudad y aceptar la oferta de la Universidad de Clemson para dar el brinco a nivel colegial.
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Su llegada al profesionalismo con los Houston Texans en 2013 significó el primer sueño cumplido, pero tras 12 temporadas, es hasta ahora que podido alcanzar el gran juego, el Super Bowl, tras fallidos pasajes por Arizona y Tennessee.
“A todos los niños que viven en pueblos pequeños, en casas pequeñas, con padres solteros. A los niños que ven violencia, que ven pérdidas, que no obtienen los recursos que merecen, pero que aún tienen grandes sueños. Sepan que yo era un niño en su misma situación y que esta semana estoy jugando en el Super Bowl.
“No se rindan, trabajen duro, sigan creyendo. El lugar donde comienzan no determina dónde terminarán”, publicó.
Hopkins también se ha mostrado agradecido con los Titanes por haber aceptado su solicitud de canje y que haya sido Kansas City el que lo sumó a mediados de esta temporada.
“Tienes que ser paciente, tienes que verte a ti mismo lográndolo. Siempre me vi estando en una mejor situación o siendo una persona distinta a lo que era el ambiente en el que crecí”, dijo en entrevista.
“Voy a tratar de hacer todo lo que pueda para ayudar a mi equipo a ganar, no soy un tipo de estadísticas, no juego por las estadísticas, para mí sólo se trata de ganar”.