Francia.- Este lunes 6 de febrero, siete niños fallecieron junto a su madre luego de que la vivienda que habitaban se incendiara, el padre de la familia quedó vivo en Charly-sur-Marne, ubicado a aproximadamente 80 kilómetros de París, en Francia.
La Fiscalía local señaló que este hecho ocurrió porque una secadora se prendiera fuego en la planta baja, por lo que la salida del domicilio quedó bloqueada.
Los niños y su madre murieron asfixiados, ya que los cuerpos no se encontraban calcinados; la fiscal de Soissons, Julien Morino-Ros, señaló para AFP que en el hogar no había un problema de insalubridad.
"Espero de todo corazón que no sintieron nada, que no vieron nada. Estábamos allí, en la calle. Toda la noche hemos visto el horror", dijo Sylvie Corré, esposa del propietario de la casa para AFP.
Fue alrededor de las 00:52 horas (local) que los vecinos alertaron a las autoridades sobre el incendio, sin embargo, la intervención de los bomberos fue complicada ante la estrecha calle en la que se encontraba la vivienda.
De acuerdo con la prefectura de la zona y el Ministerio Público, un vecino bombero actuó solo y rescató al padre de familia antes de que las autoridades competentes arribaran a la zona; el hombre sólo sufrió quemaduras graves por lo que fue trasladado a un hospital de la localidad, no obstante, trascendió que su vida no corre peligro.
Aparentemente, cuando se percataron del incendio, el padre intentó intervenir el incendio en la planta baja y pidió a los niños y la mujer que se refugiaran en la segunda planta.