Monterrey.- La estrategia de seguridad que lleva a cabo el municipio de Monterrey, no sólo contempla la renovación de unidades y equipamiento, también prevé un aumento en la fuerza policial, pues para este 2023 tiene una meta de reclutar por lo menos 300 nuevos elementos, así lo informó Rubén Aguilar Torres, inspector general de operación policial.
En 2022, la capital de Nuevo León logró el reclutamiento de 160 policías, sin embargo, confían en aumentar la captación de uniformados ya que a la fecha tienen 100 jóvenes en la academia municipal.
“Tenemos una meta este año de poder llegar a 300 nuevos policías y si se puede más, más, la capacidad de nuestra academia es mayor, pero tenemos que ser muy conscientes de que las metas son para cumplirse, entonces son como 300 policías los que van a llegar este año yo creo”, dijo el funcionario regio durante una entrevista de radio en ABC Noticias edición matutina.
Aunque en Monterrey, la policía municipal supera los mil 100 uniformados, sólo 700 forman parte del despliegue de seguridad en las calles de la ciudad, el resto están destinados a otras áreas como la central de radio, C4, resguardo de armería, labores administrativas, entre otras.
Por ello, si consiguen sumar 300 nuevos policías, se contará con mayor fuerza para dar una cobertura eficiente en todos los sectores del municipio. La idea es reclutar la misma cantidad de efectivos por año.
A inicios del pasado mes de septiembre, el gobierno que encabeza Luis Donaldo Colosio tomó el control de 220 colonias del sector norponiente, después de que le fue cedido por la Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León. Por lo que, al sumar esta zona, tiene que contar con más policías que refuercen la presencia.
“Una de las cosas que nos da satisfacción es que el 40 por ciento de esos policías tienen una carrera profesional o una carrera técnica, es decir estamos captando policías mejor preparados académicamente", indicó Aguilar.
El martes 17 de enero, el gobierno municipal hizo la entrega de 157 nuevas unidades policiacas, que se suman a la inversión en equipamiento del C4, así como a la renovación de dispositivos de video vigilancia, software y la adquisición de mil cámaras corporales con tecnología de última generación.