¿Qué tan tóxica es la columna de humo que expulsó la refinería de Cadereyta?

El humo color amarillo que emergió de la refinería de Cadereyta sería dióxido de azufre, y aquí te explicamos qué es y qué tan dañino puede ser este material.

Refinería de Cadereyta expulsa dióxido de azzufre | Twitter / Samuel García
Refinería de Cadereyta expulsa dióxido de azzufre | Twitter / Samuel García
Por
Escrito en LOCAL el

Cadereyta Jiménez. – Durante las últimas semanas, la refinería de Pemex ubicada en el municipio de Cadereyta Jiménez ha recibido múltiples críticas a causa de las exhalaciones de contaminantes que ha registrado, y que derivaría en una clausura que podría ser interpuesta por el Gobierno de Nuevo León.   

La semana pasada, la ciudadanía que habita en la zona metropolitana de Nuevo León reportó olores desagradables que, tras una serie de investigaciones, resultaron haber sido consecuencia de los trabajos llevados a cabo en la refinería Ing. Héctor R. Lara Sosa.

Ayer domingo, en redes sociales surgieron imágenes y videos de la misma refinería, expulsando al aire vapor de color amarillo que, a decir por expertos, se trata de dióxido de azufre.

¿Qué tan tóxico es el dióxido de azufre?

El dióxido de azufre es un gas incoloro y no inflamable, de olor fuerte e irritante. Es una sustancia reductora, que con el tiempo y en contacto con el aire y la humedad, se convierte en trióxido de azufre.

Azufre en piedra | Pixabay

Este material es tóxico y afecta sobre todo las mucosidades y los pulmones de las personas, provocándoles  ataques de tos e irritación de ojos, garganta y vías respiratorias.

“La exposición de altas concentraciones durante cortos períodos de tiempo puede irritar el tracto respiratorio, causar bronquitis, reacciones asmáticas, espasmos reflejos, parada respiratoria y congestionar los conductos bronquiales de los asmáticos”, advierte el Registro Estatal de Emisiones y Fuertes Contaminantes del Gobierno de España.

Por si te interesa: Pemex rechaza clausura a Refinería de Cadereyta por ser día inhábil.

El Gobierno de Nuevo León, consciente de esta situación, a través de la Secretaría de Medio Ambiente, se encuentra atento al accionar de la refinería de Cadereyta, tan es así que ya amenazó con una posible clausura a fin de detener esta situación que atenta la calidad del aire que se respira en el estado, y sobre todo en ´pareas cercanas.