Monterrey.- El mal temporal en el campo neolonés afectó al 11 por ciento del territorio de uso agropecuario, así lo dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en el Censo Agropecuario 2022, que se realizó por primera vez en 15 años.
Nuevo León tiene un total de 3 millones de hectáreas que existen para vocación o uso agropecuario, de las cuales, 2.8 millones fueron censadas por el INEGI, donde se recabó que un millón 035 mil 429 de hectáreas funcionan para vocación agrícola.
En este sentido, la entidad alberga 643 mil 750 hectáreas de superficie agrícola adecuada para producción, número del que se desprenden 156 mil 532 hectáreas que no tienen sembrado, de acuerdo con el coordinador estatal del INEGI, Rigoberto Beltrán.
“(Los productores) Declararon que no está sembrada por estar en descanso: 85 mil 873 hectáreas. Y que no están sembradas por problemas de mal temporal, falta de crédito o dinero para llevar a cabo la actividad, o incluso no hubo quien la sembrara, 70 659 hectáreas”, manifestó.
El censo plasma que Nuevo León contiene 43 mil 502 unidades de producción agropecuaria, donde 27 mil 378 están activas, y 16 mil 124 están en descanso.
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Estos no son los únicos apartados donde el Estado padece en cuanto al trabajo de campo, pues el estudio arroja que es el antepenúltimo lugar en tener jornaleros en el sector agropecuario y forestal, con el 0.2 por ciento a nivel país.
“Respecto a cuántas plazas de jornaleros se generan, en Nuevo León estamos prácticamente somos de las entidades con menos, solo está por debajo de nosotros la Ciudad de México y Querétaro. Se entiende por la actividad, aquí es más pecuario, se requiere menos mano de obra”, subrayó Rigoberto Beltrán.
Mientras tanto, los productores que tiene la entidad no reflejan continuidad entre las generaciones, pues actualmente el 44 por ciento de personas que se dedican a esto son de 65 años o más, el 42 por ciento es gente de entre los 45 y 64 años, y solo el 13 por ciento son personas de entre 18 y 44 años.