Monterrey.- La refinería debe irse de Cadereyta, es el tajante pronunciamiento que lanzó el gobernador de Nuevo León, Samuel García, tras un año de fallidas gestiones con Pemex.
En sus redes sociales el mandatario publicó escrito al que tituló "Una carta para Nuevo León", y que fue emitido al mismo tiempo que en la Explanada de los Héroes ciudadanos se manifestaban contra la refinería de Cadereyta Héctor R. Lara Sosa.
En tres cuartillas Samuel García expone que las emisiones contaminantes de la planta petrolera son una de las principales causas de la contaminación del aire, y con ello atenta contra la salud de la población y de futuras generaciones.
"La refinería debe irse de Cadereyta porque no podemos seguir comprometiendo nuestra salud y la de las generaciones futuras (...) la reubicación de la refinería de Cadereyta es la única solución efectiva y de largo plaza para enfrentar la contaminación en el área metropolitana", sentenció el gobernador.
Acompañó a su pronunciamiento la advertencia de que este lunes enviará al Congreso local una iniciativa enfocada al la "defensa del derecho humano al aire, incluso en áreas que sean de materia federal", escribió Samuel García.
El 19 de enero de 2022, la Secretaría del Medio Ambiente de Nuevo León sostuvo una reunión con funcionarios de Pemex; en aquel entonces el titular de la dependencia, Alfonso Martínez Muñoz, calificó la reunión como exitosa tras solicitarle a la paraestatal reducir emisiones.
Sin embargo, Pemex no emitió pronunciamiento alguno, y conforme avanzó el último año la dependencia estatal compartió a la opinión pública que al buscar nuevamente a los funcionarios de la dependencia federal solo encontraron silencio.
Como el pasado viernes 26 de enero, cuando Medio Ambiente se quedó esperando la visita de algún funcionario de Pemex a sus oficinas en la Torre Administrativa.
A un año de distancia de aquella reunión que fue esperanzadora, el gobierno estatal en voz del Ejecutivo manifestó un claro cambio de enfoque al no mencionar reducción de emisiones, y en su lugar una manifestación clara de que la refinería de Cadereyta debe irse.