Uneme Dedicam beneficia a más de mil mujeres con su programa gratuito contra el cáncer 

El cáncer de mama es la primera causa de muerte en mujeres a nivel nacional, por ello la importancia de clínicas para atenderlo.

Créditos: Especial
Por
Escrito en LOCAL el

Monterrey.-  Al inicio, Imelda se derrumbó al considerar su diagnóstico de cáncer de mama como una sentencia de muerte, pero recibir tratamiento adecuado, apoyo integral de especialistas y de su familia le han ayudado a Rosa Imelda Vargas Vázquez a combatir y ganar terreno contra su enfermedad. 

Su familia es el motor para “no dejarse caer”, su hija Michel, de 21 años, y su hijo Miguel de 16, y aunque el tratamiento al inicio fue pesado, cada día ha sido un regalo y una oportunidad para avanzar.

“Me tocaban cinco horas de quimioterapias, sales muy cansada, agotada, estuve una semana y media en cama. 

“Después de la semana empezaba a agarrar mis fuerzas, mis hijos me daban fuerza, mis hermanos me daban el aliento y empezaba a tener mi rutina normal, era querer vivir para estar con ellos”. 

Hace casi dos años, al autoexplorarse, Rosa Imelda sintió una bolita en el pecho del lado izquierdo, pero tuvo un mal diagnóstico de dos doctores, y hasta el tercer chequeo se enteró del carcinoma. 

“No sabía lo que era, y resultó ser un tumor maligno. Ahí sufrí mucho porque asocias cáncer con muerte y todo se te cae al pensar que ya tenía los días contados con el cáncer de mama”, comentó. 

Ella indicó que inicialmente los tratamientos con médicos particulares, tratamientos y estudios fueron muy costosos al no tener una derechohabiencia en salud, hasta que se contactó con la Unidad de Especialidades Médicas para la Detección y Diagnóstico de Cáncer en la Mujer, (Uneme Dedicam). 

“Llego aquí a la clínica gracias a la doctora Paulina, Dios es muy bueno porque me ha puesto a personas en mi camino y me dijo que me presente a la clínica y empiezo todos mis estudios y todo mi proceso con el oncólogo y con mis quimioterapias. 

“Cuando yo me enteré del carcinoma me mandaron a hacer muchos estudios. Llegando aquí la cobertura es gratuita; no tengo seguro particular, ni social y gracias a la clínica, a Samuel el gobernador, al sector Salud y al personal de aquí. 

“Ningún examen se me ha cobrado, en mi economía por el trabajo lo tengo un poco detenido, lo único es mi tiempo y vale la pena porque es mi vida y es cobertura universal”, agregó Vargas. 

A Imelda le gusta bailar, nadar, montar a caballo, pasar el tiempo con la familia y disfrutar de una comida juntos, es licenciada en Contabilidad y aunque está en pausa laboral por el tratamiento, se encuentra planeando cómo retomar su actividad económica. 

Además del aspecto médico, el apoyo psicológico y hasta de nutrición han sido otros factores que han contribuido a fortalecer su salud al tener una red de apoyo incluido desde el personal que abre la puerta hasta los especialistas. 

La joven madre y profesionista llamó a que cualquier mujer se concientice de revisarse periódicamente y dejar de lado cualquier tabú o pudor, al considerar que no solamente el mes de octubre es “rosa” al destacar que un diagnóstico a tiempo salva la vida. 

Como Imelda, actualmente mil 172 pacientes/guerreras están activas en el programa. Las mujeres tienen un gran aliado en su lucha contra el cáncer, gracias a la cobertura universal que les otorga el Gobierno del nuevo Nuevo León para acceder a un tratamiento gratuito.