Monterrey.- Por cuestiones tanto de estética como de salud, la industria de los gimnasios ha despuntado en Nuevo León en los últimos años, aunque este segmento presenta una notable brecha entre las grandes cadenas y los sitios de entrenamiento tradicionales.
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de estadística y Geografía (Inegi) en su Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE), actualmente hay registrados en Nuevo León, un total de mil 200 gimnasios de pesas y fitness, aunque existen más sitios sin registro.
El sector fitness ha experimentado un crecimiento exponencial en la última década. Este auge se ha visto impulsado por un aumento en la conciencia sobre la importancia de la salud y el bienestar, así como por la creciente popularidad de las actividades físicas.
Es en este contexto que instalar un gimnasio también se presenta como una oportunidad de negocio rentable y saludable; sin embargo, las grandes cadenas parecen haber acaparado las preferencias, consideran expertos.
Por poner un ejemplo, la cadena Smart Fit cuenta con 21 sucursales en la entidad, principalmente, en municipios metropolitanos, donde los costos oscilan entre los 249 pesos al mes y hasta los 559 pesos mensuales con diversas comodidades y ubicaciones en plazas comerciales de alta concurrencia.
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Lo anterior representa una competencia importante para los sitios de entrenamiento tradicionales tanto en instalaciones, sistema de negocio y costos, donde las inscripciones parten de los 150 pesos o mensualidades en promedio de 350 a 450 pesos.
Carlos Marrufo, presidente de la Asociación de Fisicoconstructivismo y Fitness del Estado de Nuevo León, indicó que por un lado el auge de los gimnasios franquicia acerca a la población a los servicios deportivos, esto también ha impactado a los gimnasios locales.
“Este fenómeno puede tener diversos impactos en la industria, por un lado, la expansión de los gimnasios de franquicia puede significar más accesibilidad para las personas interesadas en el fitness, lo cual puede contribuir positivamente a la salud y el bienestar de la población.
“Sin embargo, también es importante considerar cómo esta expansión podría afectar a los gimnasios locales de colonia, que podrían enfrentar una mayor competencia. En este sentido, sería crucial buscar un equilibrio que fomente la competencia saludable y el crecimiento sostenible de la industria, al tiempo que se protege a los gimnasios locales de colonia”, señaló el experto.
Marrufo señaló que ante este panorama se debe fomentar la comunidad local donde los gimnasios de colonia puedan destacar su conexión con la comunidad y la atención personalizada que ofrecen, para atraer a quienes valoran este tipo de servicio.
También indicó que se puede diversificar la oferta al ofrecer clases y servicios especializados que no suelen estar disponibles en los gimnasios de franquicia, tanto para diferenciarlos y atraer a un público específico.
Aunado a ello se pueden aplicar alianzas estratégicas al colaborar con otros negocios locales, como tiendas de suplementos, nutrición o ropa deportiva para generar sinergias que beneficien a ambas partes.
Por otra parte, la apreciación de clientes y deportistas se divide entre ambos subsegmentos, para Berenice Céspedes la cercanía con los entrenadores, facilidad de ubicaciones y la economía han sido factores determinantes.
“Los entrenadores son más constantes porque no los están rotando como en los de grandes cadenas, aunque a veces hay aparatos más rústicos pues también son más baratos y más cercanos a tener que ir hasta un mall para ir a entrenar y que en general son más caros”, sostuvo la deportista.
Para otros atletas como Frank Berlanga, contar con horarios extendidos, seguros al interior de plazas comerciales y con equipamientos más modernos, se privilegian a un costo económico, lo que dijo, muchas veces se traduce en deficiencias.
“Están más nuevas las instalaciones, el personal es muy amable y aunque a veces está un poco más lleno, sí hay espacios para trabajar otras partes por haber más aparatos o estaciones, he estado en gimnasios más locales, pero solían tener alguna deficiencia”, agregó.
¿Cuántos gimnasios hay en Nuevo León?
Mil 200 gimnasios de pesas y fitness
Smart Fit:
Hay 21 sucursales en Nuevo León, principalmente en la zona metropolitana
Costos:
- Plan Fit: desde 249 pesos al mes.
- Plan Smart: desde 359 pesos al mes.
- Plan Black: desde 559 pesos al mes.
Costos del gimnasio tradicional promedio:
- Inscripción: $150.00 pesos
- $450.00 pesos por mes
- $200.00 pesos por semana
- Visita: $50.00 pesos
De acuerdo a la International Health, Racquet & Sportsclub Association (IHRSA), en 2010 México reportó un total de 2 mil 300 gimnasios, para 2012 se registraron 7 mil 826, llegando a más de 12 mil unidades a 2016. Asimismo, la cantidad de usuarios casi logró duplicarse para alcanzar más de 4 millones de personas.