Monterrey.- El cierre para visitantes al Río Ramos se da por el considerable incremento en la afluencia al caudal, donde este fin de semana se registraron más de 700 vehículos que imposibilitan el paso y patrullaje de elementos de seguridad.
Patricia Salazar, alcaldesa del municipio de Allende, informó que las medidas serán tomadas de forma inmediata.
El acceso será controlado por elementos de Protección Civil de Nuevo León, Protección Civil Municipal, Fuerza Civil y seguridad y tránsito locales, donde solo se permitirá el acceso a 500 vehículos diariamente, aunado a esto un comité civil ajeno a la administración de Salazar Marroquín, estará cobrando una cuota de cien pesos para el mantenimiento de las áreas comunes, recolección de basura y baños públicos instalados dentro del lugar.
“Se registró un acceso de más de 700 carros al río, lo cual imposibilitaba el acceso de Protección Civil y Policía Municipal, entonces se tomará esta medida de como máximo darle a acceso a 500 carros para salvaguardar la integridad y seguridad de los visitantes.”
La edil enfatizó que los RZR’s, cuatrimotos y cualquier vehículo de diésel o gasolina, están prohibidos en el interior del cauce, ya que el agua del Río Ramos es la que abastece a la planta potabilizadora que brinda el suministro a los 10 mil hogares en Allende.
Comentó también que a quien se sorprenda en el interior de río con este tipo de unidades será acreedor a una multa que va desde los 16 mil hasta los 25 mil pesos, y su vehículo será confiscado hasta la liquidación de la multa.
“Prohibidos, totalmente prohibidos, siempre ha estado prohibido que se metan al río con RZR’s, motos, camionetas o cualquier vehículo de diésel o gasolina, a quien se sorprenda desacatando la indicación se le va a aplicar una multa que va de los 16 a 25 mil pesos, además el carro se les quita hasta que paguen la multa.”
Con las lluvias registradas, no solo el Río Ramos alcanzó su máximo nivel, también el pozo profundo de “La Colmena” se volvió a llenar, ya que con la extrema sequía presentada en años anteriores el aljibe se secó, lo cual nunca había ocurrido, destacó Salazar Marroquín.
“La Colmena se secó, ese pozo profundo jamás se había secado, es la primera vez en la historia que se seca y ahora, con las lluvias que llegaron, se volvió a llenar, ese pozo les da agua a dos mil personas.”