Ciudad de México. – La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) detectó ciertas irregularidades en algunas marcas de refrescos que se venden en México, y una de ellas es Jarritos, de gran tradición que ahora corre el riesgo de salir del mercado.
Jarritos formó parte de un listado de 46 distintos refrescos que fueron evaluados por el ente que preside Ricardo Sheffield, y su error fue presentar presunta publicidad engañosa.
De manera específica, la empresa fundada en 1950 por Francisco Hill Ávalos se ha caracterizado por plasmar en las etiquetas de sus productos la frase “¡Qué buenos son!”, la cual llamó la atención (para mal) de la Procuraduría.
Según el procurador Sheffield Padilla, este eslogan no ofrece detalles concretos a los consumidores, a quienes se les debe de aclarar “para qué son buenos”.
La otra ventana para que Jarritos pueda mantenerse en el mercado es retirar la frase de sus etiquetas, para no confundir a los posibles compradores.
Hasta el momento la empresa Jarritos no se ha pronunciado al respecto, y es que, recordemos, la frase “¡Qué buenos son!” no solo aparecer en las etiquetas de las botellas, sino también en sus comerciales.
¿Qué otros refrescos fueron ‘amonestados’ por la Profeco?
La Procuraduría anunció, además de Jarritos, otros refrescos que corren el riesgo de salir del mercado por diferentes situaciones.
- La Croix: Al venderse en México, la marca debe de presentar productos con indicaciones en español.
- Sisi: Porque contiene un edulcorante calórico cuya cantidad no está especificada.
- Ameyal de Mundet: Porque en su etiquete muestra algunas frutas como la fresa y el kiwi, que no forman parte del producto.
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- Sidral Aga: Porque la etiqueta señala que el refresco está elaborado con 20 por ciento de jugo concentrado de manzana, sin embargo, el análisis hecho por la Profeco no pudo comprobarlo.