Acceso a crédito, reto permanente para las Pymes

Tener opciones de financiamiento resulta clave para la subsistencia y éxito de las pequeñas y medianas empresas.

Por
Escrito en NEGOCIOS el

Una de las dificultades que parecen compartir las 4.7 millones de micro, pequeñas y medianas empresas que existen en México es la lucha por sobrevivir, mientras se enfrentan a retos de liquidez y búsqueda de financiamiento.

Esto afecta particularmente a aquellas que recién comienzan, pues la estadística dice que apenas el 48% de cada 100 sobrevive los dos primeros años de vida. Por ello, tanto cámaras empresariales como especialistas ven al financiamiento como una herramienta para soportar el crecimiento de este tipo de negocios.

“Las instituciones financieras deben ser más flexibles a la hora de evaluar a las Pymes, porque existe el problema de que en los dos primeros años ya el 52% desaparece”, comenta José Luis Garza, de la firma Creditaria, especialista en financiamiento para Pymes.

Sin embargo, agrega, las empresas deben prepararse para acceder a créditos con diferentes instituciones financieras, donde “el principal reto es tener todo en regla, la parte legal y la parte financiera”.

El aspecto legal, explica el especialista, tiene que ver con estar dado de alta en el SAT, tener trazabilidad, un representante legal o en su caso, si es una persona física con actividad empresarial, “que pueda comprobar sus ingresos, para que a la hora que le evalúen las áreas de riesgo, vean que está en regla”.

Garza apunta que es necesario que las micro, pequeñas y medianas empresas valoren las múltiples opciones que hay para acceder a créditos y no limitar la posibilidad de ganar liquidez para su negocio.

Desafortunadamente, dice, quienes no mantienen en orden su operación suelen ser los que se enfrentan a mayores dificultades para obtener financiamientos, terminando en manos de agiotistas que ofrecen condiciones muy desfavorables para los empresarios, lo que termina por acelerar su caída.

Más allá de la banca tradicional
Las Pymes, dice José Luis Garza, tienen requerimientos que pueden subsanarse por diversas fuentes, que no siempre tienen que ver con la banca, es decir, pueden acceder al factoraje, un esquema que de acuerdo con datos de Caintra, la cámara industrial de Nuevo León, es poco difundido y utilizado.

El factoraje es una alternativa de financiamiento para que una empresa pueda obtener acceso a liquidez, con base en sus cuentas por cobrar a un plazo determinado. 

Es decir, comercializa sus facturas con una institución y así puede obtener efectivo de forma inmediata, lo que le permite continuar con su operación.

En su “Agenda para el Desarrollo Industrial 2024”, la Caintra  identifica que “apenas el 2.2% de las empresas pequeñas lo utiliza” y son las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes) las que ofrecen esta opción de financiamiento, que les representa el 9.4% de su cartera total.

Incluso, advierte que instituciones como Nacional Financiera (Nafin), operada por el gobierno con la misión de impulsar el crecimiento de los sectores estratégicos de la actividad económica de México, “se ha quedado rezagada para otorgar el factoraje”.

Para algunas Pymes del ramo industrial, dice Garza, cuando se trata de la obtención de maquinaria y equipo para su operación o crecimiento, pueden acceder a instituciones financieras “que te dan arrendamiento puro y no necesitas descapitalizarte”, al final de la vida del crédito, te ofrecen “ la posibilidad de adquirirla”.

Otra opción es el Sale and Lease Back, una forma en que la empresa puede convertir sus activos en liquidez y utilizarlo como capital de trabajo.

En este caso, explica, si las Pymes tienen herramientas o vehículos, los puede vender a una institución financiera, rentarlos y eventualmente, en algún momento, volver a comprarlos.

Los créditos revolventes, agrega, son otra alternativa. Estos son otorgados por instituciones financieras que operan de manera similar a las tarjetas de crédito, pero con tasas más bajas que permiten hacer frente a necesidades inmediatas.

Acceder a estas opciones, señala, es posible hacerlo de forma directa. Sin embargo, los brokers financieros tienen la posibilidad de ahorrarle tiempo a las empresas, a través de la relación que ellos ya mantienen con las diferentes instituciones. 

Así, las compañías tienen un abanico más amplio de opciones, a fin de que no se vayan con la primera opción, con la ventaja de que la asesoría no es con cargo a la Pyme, sino a la institución financiera.