Miguel Treviño y Mauricio Fernández desentierran el hacha de guerra

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Hacha de guerra

Como adelantaron Los Infiltrados, la Luna de miel de la transición en el municipio de San Pedro ya se acabó y en su lugar el alcalde Miguel Treviño y el alcalde electo, Mauricio Fernández, desenterraron el hacha de guerra.

La causa fue la autorización del Programa Parcial de Desarrollo Urbano “Casco Urbano 2023-2040”, que aumenta las densidades del centro al pasar de una altura máxima de dos pisos a alturas de tres, cuatro y hasta seis pisos.

Al “Tío Mau” le molestó enterarse por la prensa de ese plan, pues su equipo de transición asegura que no se los habían comentado, y hasta acusó al alcalde de “estar coludido con algunos desarrolladores por intereses personales”.

Transición regia

Dicen Los infiltrados que hoy a las 10:00 horas dará inicio el proceso de transición de la alcaldía de Monterrey, en la oficina del alcalde Luis Donaldo Colosio, la misma que ya ocupó dos veces quien será su sucesor, el priista Adrián de la Garza

Luego de dos cambios de fecha, finalmente los equipos se pusieron de acuerdo y comenzarán las labores de entrega-recepción que deberán de durar cuando mucho un mes, y así dejar todo listo para la toma de protesta del 30 de agosto.

Lo interesante es que, mientras el emecista Colosio y el priista de la Garza ya avanzan en este proceso, la candidata de Movimiento Ciudadano, Mariana Rodríguez, continúa empujando ante las autoridades electorales la impugnación al proceso y la exigencia de que se desconozca el resultado del 2 de junio.

Pato recargado

Quien al parecer seguirá realizando labor social, aunque ya acabaron las campañas es Patricio “Pato” Zambrano, ex candidato del partido Vida a la alcaldía de Monterrey.

Desde el miércoles pasado, en las redes sociales del partido, Zambrano lanzó “Pato te escucha” y asegura que una vez por semana charlará con la gente y habrá más activismo y justicia y menos pugna política, que fue una de sus banderas de campaña.

Dicen Los Infiltrados que, al parecer, el ex Big Brother pretende capitalizar los bonos que cosechó durante las campañas, pues aunque quedó muy lejos de los primeros lugares sus transmisiones en vivo y sus intervenciones en debates fueron bien recibidas.