Ciudad Victoria. - Con un enfoque de género en la justicia penal, el Congreso de Tamaulipas aprobó una reforma al Código Penal estatal que permitirá sustituir la pena de prisión por arresto domiciliario para mujeres jefas de familia en condiciones de vulnerabilidad y precariedad.
Esta iniciativa, presentada por la diputada Lucero Deosdady Martínez López, busca garantizar que la privación de libertad no sea innecesaria ni desproporcionada para aquellas que se encuentren en situaciones de marginación.
La reforma, que fue respaldada por la mayoría de los legisladores, establece que, en casos en los que se determine que la pena privativa de libertad es innecesaria, la jueza o el juez podrán, de oficio o a petición de parte, aplicar el arresto domiciliario y otras medidas de control, siempre basados en dictámenes periciales.
Martínez López destacó que esta medida busca mitigar los efectos negativos del encarcelamiento en las familias, particularmente en los hijos e hijas de mujeres encarceladas, quienes podrían ser separados de su madre o, en algunos casos, vivir en centros penitenciarios.
La diputada resaltó que muchas mujeres encarceladas son las principales proveedoras de sus hogares, tanto económica como emocionalmente, lo que hace que su encarcelamiento tenga un impacto desproporcionado en sus familias y comunidades.
Con esta reforma, se pretende ofrecer una alternativa que no solo alivie las consecuencias del encarcelamiento, sino que también favorezca la reintegración social de las mujeres, mejorando sus condiciones de vida, especialmente en casos de mujeres que son el principal sostén de su familia.
Con esta aprobación, la diputada agregó que el Congreso de Tamaulipas avanza en su compromiso por una justicia más equitativa, que considere las realidades sociales de las mujeres en situación de vulnerabilidad y que busque alternativas menos punitivas que contribuyan a la estabilidad familiar y social.