El mes de Noviembre ha llegado y con ello la llegada de los sistemas frontales de frío y más allá de la sensación de incomodidad, las bajas temperaturas pueden desencadenar una serie de problemas de salud que debes conocer.
En esta nota descubrirás cuáles son los riesgos de exponerte al frío y cómo puedes disfrutar la llegada de las bajas temperaturas en México sin problemas.
Las enfermedades y el frío
La Sociedad Española de Inmunología (SEI) reveló que el frío puede debilitar nuestro sistema inmunológico, provocando la incrementación en las posibilidades de padecer enfermedades. Esta debilidad se debe a que existen el incremento de ciertos patógenos que pueden afectar al organismo a través de las mucosas y la piel.
¿Cuáles son las enfermedades que provoca el frío?
La Secretaría de Gobierno de México, informó una serie de enfermedades que se presentan frecuente durante esta temporada; entre las que se encuentran:
Hipotermia
Esta es una de las enfermedades con más urgencia médica que ocurre cuando la temperatura del cuerpo baja demasiado. Si no se trata, la hipotermia puede hacer que fallen el corazón y el sistema respiratorio y, a la larga, deriva en la muerte.
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Afecciones respiratorias
El aire frío inflama los pulmones e inhibe la circulación, lo que aumenta el riesgo de afecciones respiratorias.
Trombos y cardiopatía isquémica
El frío predispone a la formación de trombos en las arterias cerebrales y coronarias, así como al aumento de la presión arterial.
Lesiones
El frío puede aumentar el riesgo de caídas y accidentes de tráfico, con las consiguientes lesiones, por la formación de placas de hielo o nieve.
Congelamiento de la piel
El frío ambiental provoca que los capilares de la piel se contraigan, lo que reduce la irrigación de la piel y hace que reciba menos oxígeno y nutrientes.
¿Cómo cuidarte del frío? | Recomendaciones
Dependencias gubernamentales, así como cuerpos de auxilio han derivado una serie de recomendaciones para la temporada de frío que van desde cubrirse adecuadamente al salir hasta la vacunación.
- Vístete con el método de la cebolla: para ello deberás de cubrirte con varias prendas, no solo te calientan mejor que una ropa gruesa, sino que podrás acondicionarte de acuerdo al lugar donde te encuentres.
- Evita utilizar doble media o calcetín porque se bloquea la circulación; utiliza calcetines de lana.
- Protégete el rostro, la cabeza, manos y orejas.
- Toma líquidos calientes para que mantengas tu temperatura corporal.
- Come frutas y verduras ricas en vitamina C como la naranja, el limón, la guayaba, fresas, ciruelas, pimientos, brócoli, entre otras.
- Bebe mucha agua, preferiblemente al tiempo, mantener la hidratación corporal permite que el cuerpo regule mejor su temperatura.
- Al salir de un lugar caliente cúbrete boca y nariz.
- Evita los cambios frecuentes de temperatura de lugares donde te encuentres con aire acondicionado a espacios a la intemperie.
- Utiliza la calefacción en forma moderada para que los cambios de temperatura con el exterior no sean muy bruscos.
Ahora bien, si perteneces a grupos de riesgo previamente diagnosticados es necesario que consideres la vacunación contra la Influenza.
Grupos de riesgo:
- Niñas y niños de 6 a 59 meses de edad.
- Adultos de 60 años y más.
- Embarazadas.
- Personas con diabetes no controlada, obesidad grave, enfermedades respiratorias o del corazón graves, personas con VIH y personal de Salud.