Las tandas son un método popular de ahorro en México, especialmente entre personas que buscan una forma sencilla de reunir dinero en un plazo determinado. Sin embargo, este esquema tiene múltiples desventajas que lo hacen poco recomendable frente a otras opciones de ahorro más formales y seguras. A continuación, te presentamos cinco razones por las cuales las tandas podrían no ser la mejor manera de manejar tus finanzas.
Falta de seguridad financiera
A diferencia de las instituciones bancarias que cuentan con mecanismos de protección, las tandas no ofrecen garantías de que recibirás tu dinero. Si uno de los participantes deja de aportar o el organizador desaparece, corres el riesgo de perder tu inversión sin posibilidad de recuperarla.
No generan intereses
El dinero que aportas en una tanda se mantiene estático, sin crecer ni generar rendimientos. Al participar en una tanda, estás dejando pasar la oportunidad de hacer que tu dinero trabaje para ti, como lo haría en una cuenta de ahorro o inversión que ofrece intereses.
Rigidez en los pagos
Las tandas requieren que todos los participantes cumplan con sus aportaciones puntualmente. Si tienes una emergencia económica y no puedes pagar, no solo te afectas a ti mismo, sino que comprometes el funcionamiento de todo el grupo, causando fricciones y posibles conflictos.
Riesgo de mala administración
La confianza depositada en el organizador es fundamental, pero esta persona puede no tener las habilidades necesarias para gestionar correctamente el dinero. Una mala administración puede resultar en pérdidas o malentendidos que ponen en riesgo los recursos de todos.
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Falta de liquidez inmediata
En una tanda, solo puedes acceder a tu dinero en la fecha asignada. Si necesitas efectivo antes, no tienes opciones de retirarlo sin afectar el acuerdo del grupo, lo cual limita tu capacidad de respuesta ante situaciones inesperadas.
Aunque las tandas pueden parecer una solución fácil para ahorrar, su falta de seguridad y flexibilidad, junto con la ausencia de rendimientos, hacen que no sean la mejor opción. Es recomendable explorar alternativas más formales que garanticen tu dinero y lo hagan crecer de manera segura