Después de la invasión que sufrieron de parte de los aficionados de Eintracht Frankfurt, Barcelona tomará medidas para que no vuelva a suceder.
Un día después de la eliminación del cuadro catalán de la Europa League, Joan Laporta, presidente de la institución, mencionó que para las competencias internacionales ahora tendrán entradas nominativas, es decir, con nombre.
“Es una medida que nunca se quería tomar porque incomoda a los socios y barcelonistas que tienen una conducta normal, la que se debe tener y que son muchos, y les agradezco que el pasado 14 de abril vinieran a animar al equipo y quiero agradecerles el apoyo. Pero no nos queda más remedio que adoptar esta medida. Haremos que las entradas sean nominativas, se tendrá que hacer, pido que se comprenda para que no vuelva a ocurrir nunca más lo que sucedió contra el Eintracht en el Estadio”, señaló.
Fueron alrededor de 30 mil seguidores de Frankfurt los que acudieron a este encuentro y, Laporta señaló que solamente fueron 5 mil entradas las que se vendieron para el club alemán. Además, destacó que los boletos puestos a la venta no podían ser adquiridos por tarjetas de crédito provenientes de Alemania, por lo que asegura que afición del club vendió esos boletos.
"Las entradas que vendimos al equipo contrario por la normativa UEFA son 5.000, las que nos obliga la UEFA. Estas son las que están localizadas en lo alto de la tercera gradería. Las 34.440 anteriores son las que estaban debajo. 2425 fueron invitaciones de UEFA (por normativa UEFA también). Y la asistencia de los abonados en el estadio fue de 37.746 abonos. En total, la asistencia total fue de 79.468 personas".
“Insistir en que las 34.440 que el Club puso a la venta eran entradas que llevaban incorporada las restricciones alemanas. En el Club no vendimos entradas a los alemanes. Quien compró estas entradas, las compraron y se las hicieron llegar a los alemanes, esto es una evidencia", puntualizó.
Durante el encuentro, imágenes que mostraban el inmueble con gran cantidad de camisetas color blanco (característico de Eintracht) comenzaron a hacerse virales, generando así indignación de parte de seguidores catalanes.