Bélgica.- Tras una carrera redonda para la escudería de Red Bull, en la que Max Verstappen terminó en el primer lugar y Sergio Pérez en segundo, la euforia de los integrantes del equipo terminó por dañar el trofeo que recibió Verstappen.
Tras la premiación en el Gran Premio de Bélgica de Fórmula 1, después de posar para la foto de todo el equipo de Red Bull, los integrantes siguieron el festejo de una manera eufórica alrededor de los trofeos, al grado de que se olvidaron, por unos instantes, de ellos.
Verstappen corrió para evitar ser bañado por los líquidos lanzados, al tiempo de que se percató de que sus compañeros estaban muy cerca de tirar los trofeos acomodados en el piso, "está roto de nuevo, el trofeo está roto de nuevo", grito Max, indicando su premio dañado.
Helmut Marko, asesor de la escudería de Red Bull, trató de rescatar los trofeos, pero solo logró proteger el galardón de Constructores y el que recibió “Checo”.
Red Bull ya suma tres trofeos rotos
En lo que va de la actual temporada en la Fórmula 1, la escudería Red Bull sufre lo que algunos ya llaman “La maldición de Lando Norris”, ya que han sido dañados tres de sus trofeos ganados.
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La primera copa rota se dio en el Gran Premio de Gran Bretaña, cuando en los festejos con la champaña, Verstappen dejó su galardón en el podio y Lando Norris lo hizo caer tras pegarle a la tarima, en el momento que agitaba su botella. En el GP de Hungría, el piloto de McLaren volvió a hacer de las suyas de la misma manera.