Estados Unidos.- Simone Biles, se convirtió en la gimnasta más condecorada de la historia de Estados Unidos, al conquistar este domingo su octavo título en campeonato de Gimnasia de Estados Unidos y batió el récord de Alfred Jochim, impuesto desde 1933.
Con su victoria de este fin de semana, con la que se enfila a los Juegos Olímpicos de París 2024, se convierte en la gimnasta con el mayor número de victorias en el All-Around contando las categorías masculina y femenina.
Añadió a sus vitrinas la edición de este año, luego que se había consagrado en 2013, 2014, 2015, 2016, 2018, 2019 y 2021. Es, además, la gimnasta más veterana en ganar el campeonato en Estados Unidos.
Biles llagó al segundo día de competición en San José tras brillar el sábado con un total de 59 mil 300 puntos, por delante de Shilese Jones, con 56 mil 550 puntos, y de Skye Blakey, con 55 mil 700.
Completó sus cuatro ejercicios de forma sobresaliente y confirmó el nivel mostrado a principios de agosto en Chicago, cuando regresó por primera vez desde los Juegos de Tokio, en 2021.
Te podría interesar
En esos Juegos, Biles renunció a los ejercicios de individual, suelo, salto y asimétricas tras sufrir esa desconexión en el ejercicio de salto. Regresaría en esas mismas Olimpiadas para realizar el ejercicio de barra, que le entregó la medalla de bronce.
La multimedallista olímpica abrió su noche con el salto y lo realizó con elegancia y convicción pese a lucir un vendaje en su tobillo derecho; mantuvo su alto nivel en las barras asimétricas y en el equilibrio y colocó la guinda a su victoria con el suelo.
Triunfó con un total de 118 mil 400 puntos y recibió la ovación del público por su extraordinario ejercicio de suelo.
"Fue fantástico, todos creen en mí, mis compañeras, mis entrenadores, mi familia. Sólo tengo que empezar a creer en mí un poquito más", dijo Biles al acabar su prueba y prefirió no hablar de los objetivos que se ponen de cara al futuro, con los Juegos de París 2024 en el horizonte.
Su participación en los Juegos de París 2024 todavía está en el aire, pero las sensaciones y el nivel lucido en Chicago y en San José generaron enorme optimismo en el público estadounidense.