México.- El verdadero espíritu se hace presente en los momentos más complicados para los atletas, como se vio en un medio maratón, en el que el un corredor recibió ayuda de la manera menos esperada.
A través de redes sociales se hizo viral el video de un joven competidor que se acerca a la meta para terminar una carrera de resistencia, pero el esfuerzo físico le pasa factura y tiene que ser auxiliado por su madre y por un hombre disfrazado de Spiderman.
Cuando solo faltaban pocos metros para acabar, el hombre se vence ante el cansancio y vomitó debido al esfuerzo y la deshidratación.
Parecía tambalearse mientras corría los últimos metros, pero su madre areció a su lado de manera sorpresiva, para darle palabras de aliento y tomarlo del brazo para llevarlo a la meta.
“‘En la vida solo cuentas con mamá… y con Spiderman”, es la frase con la que cierra el video, pues el superhéroe arácnido hizo una aparición estelar en la carrera, para salvar el día con su papel de ‘amigable vecino’ que lo caracteriza.
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La sorpresa de los espectadores fue mayúscula cuando el hombre con disfraz del personaje de Marvel Comics detiene su paso y regresa, para auxiliar al joven y apoyar a su mamá, para llevarlo a la línea de meta.
Con gestos de amabilidad y desbordando energía, el falso "Peter Parker” tomó al joven por el brazo y lo alentó para seguir con la carrera.
En el punto de llegada los otros competidores celebraron que el joven cumplió su objetivo de terminar la carrera, mientas que a los usuarios de redes sociales se mostraron conmovidos por la actitud de la madre y del otro competidor que ofreció su ayuda.
En el video se puede observar que la carrera en cuestión se trata de una media maratón, que tiene una distancia de 21.097 kilómetros.
Mientras que en un maratón se recorren más 42 kilómetros. Esta distancia (alrededor de 40 km) se usa ya que es lo que corrió un soldado griego, tras la batalla de Maratón en el 490 A.C, hasta Atenas, para anunciar la victoria frente al ejército Persa.
No obstante, la distancia oficial de 42 km y 195 metros se instauró en los Juegos Olímpicos de Londres 1908.