Estados Unidos.- Las autoridades estadounidenses continúan investigando la muerte de tres fanáticos de los Chiefs que fueron localizados congelados en el patio trasero de la casa de su amigo.
Un médico explicó al portal de noticias The New York Post que la muerte se habría originado porque las víctimas estuvieron expuestas a algún tipo de droga.
“Una cosa es que una persona acabe trágicamente en un montón de nieve después de salir de un bar. Pero es una historia completamente diferente que tres personas terminen muertas sentadas en el porche trasero de alguien después de una fiesta.
"El hecho de que haya tres individuos realmente aumenta la curiosidad y la tragedia de este caso y, creo, aumenta la probabilidad de que algo más que cantidades moderadas de alcohol estuvieran en juego aquí", dijo el Dr. Caleb Alexander, epidemiólogo de la Universidad Johns Hopkins.
Las víctimas fueron identificadas como Clayton McGeeney, de 36 años, David Harrington, de 37, y Ricky Johnson, de 38.
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Alexander señaló que no quería especular hasta que llegaran los informes toxicológicos, pero todo indicaba "que podría ser consistente con opioides, benzodiazepinas, antihistamínicos, barbitúricos, relajantes musculares.
"Hay docenas de posibles medicamentos recetados que, cuando se combinan con alcohol, podrían causar un nivel de sedación que, en última instancia, conduciría a la muerte congelada".
Sin embargo, también añadió: "No necesariamente tenían que morir a causa de las drogas... podrían simplemente haberse congelado, congelado hasta morir".
¿Qué pasó con los fanáticos de los Chiefs?
Los tres hombres fueron encontrados muertos y congelados en el patio trasero de la casa de su amigo Jordan Willis el 9 de enero. El hallazgo ocurrió dos días después del juego Kansas City Chiefs
Las autoridades comenzaron con la búsqueda de los hombres luego de que la esposa de McGeeney solicitara un control de asistencia social porque él no regresó a casa.
¿Qué dijo el amigo de las víctimas?
Cuando la policía acudió a la casa de Jordan Willis, éste afirmó que no tenía idea de que sus amigos estaban muertos en su patio trasero.
El abogado de Willis, John Picerno, dijo que su cliente había estado durmiendo cerca de un ventilador ruidoso y usando audífonos durante dos días mientras las familias de sus amigos intentaban desesperadamente comunicarse con él y localizarlos.
Señaló que su cliente cooperó en todo momento con la policía, la cual, en sus primeras investigaciones no considera “al 100%” las muertes como un homicidio.