Toluca.- La afición mexicana en el Estadio Nemesio Diez lanzó un objeto y golpeó en la cabeza a uno de los integrantes del cuerpo técnico del entrenador de Honduras, Reinaldo Rueda.
Fue al minuto 71, luego del gol de Henry Martín que significó el 2-0 y 2-2 en el global, que un sector de los seguidores mexicanos comenzó a agredir a la banca catracha, hasta que uno de sus integrantes cayó al suelo.
Tras el golpe, el asistente de Rueda quedó tendido en el pasto y tuvo que ser auxiliado por los paramédicos que se encontraban en el estadio. El incidente no pasó a mayores y el partido se reanudó instantes después.
Durante el tiempo que las asistencias médicas apoyaban al hondureño, la afición presente en 'la Bombonera' comenzó a gritar “Quiere llorar, quiere llorar”, para burlarse de lo acontecido.
Tras esa agresión, no se reportaron otros ataques o conatos de bronca en la tribuna, siendo las discusiones y empujones sobre la cancha las únicas agresiones que se vieron al final del partido.
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La agresión sería una venganza por lo acontecido el viernes 15 de noviembre, cuando un aficionado hondureño descalabro al seleccionador mexicano, Javier Aguirre, con una lata llena de líquido.
Si bien ‘el Vasco’ minimizó la agresión, asegurando que “No tiene caso ni mencionar, es futbol y no soy de quejarme”, la CONCACAF sancionó a la Federación de Futbol de Honduras (FFH) con un partido a puerta cerrada.
Tras lo ocurrido en San Pedro Sula, la Secretaría de seguridad del Estado de México (SSEM) coordinó un operativo que contó con 504 elementos, quienes se encargaron de cuidar la seguridad en la casa del Club Deportivo Toluca.
Además, 60 unidades de la policía estatal fueron destinadas a resguardar las zonas aledañas al Estadio Nemesio Diez, para evitar cualquier acto ilícito cerca del inmueble.