São Paulo.- Un tribunal de Justicia Deportiva del estado de Paraná impuso una sanción mayor al futbolista que fue llamado “mono” durante un partido de la Copa FPF 2025, en comparación con la pena aplicada al autor del insulto racista, informaron fuentes deportivas.
El incidente ocurrió el 4 de octubre en el encuentro entre Batel y Nacional Atlético Clube, correspondiente a la tercera jornada del torneo. En el minuto 41, durante un tiro de esquina a favor de Nacional, el volante del Batel, Diego de Lima, declaró que fue empujado, insultado y escupido por el defensor rival Paulo Vitor, conocido como PV.
Según Diego, respondió llamando a PV “malaco” (canalla), pero el zaguero alegó que el insulto fue “macaco” (mono), lo que provocó que PV reaccionara con un puñetazo. El árbitro detuvo el partido y expulsó al defensor, mientras que Diego fue trasladado al hospital.
El Tribunal de Justicia Deportiva de Paraná dictó un fallo unánime el martes por la noche. Diego fue sancionado con siete partidos de suspensión y una multa de 2.000 reales (aproximadamente 370 dólares), por el insulto considerado racista. PV recibió una sanción de diez partidos por el escupitajo y la agresión física. Solo uno de los jueces votó por absolverlo del golpe, al considerarlo una reacción al insulto.
“Sé que no es la mejor forma de lidiar con eso. No es mi perfil”, declaró PV durante la audiencia.
El club Nacional anunció que apelará la decisión ante instancias superiores de la Justicia Deportiva.
En paralelo, la Policía Civil de Paraná investiga el caso. Ambos jugadores ya prestaron declaración y las diligencias continúan, según el portal Ge.
En Brasil, el delito de injuria racial está tipificado en el Código Penal y puede ser sancionado con hasta cinco años de prisión.
Este caso ha generado debate sobre la proporcionalidad de las sanciones en el deporte y el tratamiento institucional ante actos de racismo y violencia en el futbol brasileño.
