Denver, Colorado.– En un cerrado encuentro de jueves por la noche, los Denver Broncos superaron 10–7 a los Las Vegas Raiders en el Thursday Night Football de la Semana 10 de la NFL, en un partido donde las defensivas fueron las grandes protagonistas y las ofensivas dejaron más dudas que certezas.
El encuentro inició con ventaja para Las Vegas, que se puso al frente con una corrida de 4 yardas de Ashton Jeanty en el primer cuarto. Sin embargo, Bo Nix, mariscal novato de Denver, respondió con una serie de cinco jugadas que culminó en un pase de 7 yardas a Troy Franklin para igualar el marcador.
A partir de ese momento, el dominio fue defensivo. Denver limitó a los Raiders a solo 188 yardas totales, registrando seis capturas de mariscal, con Nik Bonitto como figura destacada al participar en 1.5 de ellas. Además, una jugada clave llegó en el tercer cuarto, cuando J.L. Skinner bloqueó un despeje que dejó el balón en zona roja rival, abriendo el camino para el gol de campo decisivo.
El empate 7–7 se rompió hasta el último cuarto, cuando Wil Lutz convirtió un gol de campo de 32 yardas que marcó la diferencia definitiva en favor del conjunto local. Con este resultado, los Broncos extendieron su racha positiva y se consolidan en la parte alta de la AFC Oeste, mientras que los Raiders siguen sin encontrar regularidad en la temporada.
En contraste, la ofensiva de los Broncos volvió a sufrir altibajos. Bo Nix completó 16 de 28 pases para 150 yardas, con una anotación y dos intercepciones. Del lado de Las Vegas, Geno Smith terminó con 143 yardas aéreas y una intercepción, además de sufrir constante presión por parte de la línea defensiva de Denver. Un intento fallido de gol de campo de 48 yardas en los minutos finales impidió el empate para los Raiders.
Con esta victoria, los Broncos mantienen el impulso que los ha colocado como una de las defensivas más sólidas de la NFL, con 7 triunfos consecutivos que los colocan como el equipo con mejora récord de la Conferencia Americana (8-2) . Por otro lado, los Raiders, con marca de 2–7, atraviesan un momento crítico y con nulas probabilidades de entrar a Playoff.