Washington D. C..- Mientras se desarrolla el Sorteo Final de la Copa Mundial FIFA 2026, Nuevo León tiene representación política y deportiva en el evento, reforzando su papel como una de las sedes mexicanas del torneo y avanzando en el proceso de coordinación internacional que requiere la organización de una sede mundialista.
El gobernador Samuel García encabeza la presencia institucional del estado, acompañado por Adrián de la Garza, alcalde de Monterrey, y Héctor García, alcalde de Guadalupe. Su asistencia forma parte del seguimiento operativo de los compromisos adquiridos ante FIFA y del acompañamiento directo a la presentación de Monterrey dentro de la plataforma mundial del torneo.
Desde el sector deportivo también se registra participación activa. Una delegación de Rayados viajó al sorteo encabezada por Pedro Esquivel, presidente administrativo del club y miembro del comité organizador de la sede Monterrey. Manuel Filizola, presidente del consejo de administración del club, se suma como parte de los representantes del proyecto. A ellos se agregan Everardo Valdez, director de relaciones institucionales y medios; Alberto Molina, director de operaciones; Lucy Salazar, project manager del club; y Alejandro Hütt, host manager designado para la sede.
La presencia conjunta de autoridades y directivos está alineada con el papel del Estadio BBVA como espacio anfitrión de partidos mundialistas. Monterrey recibirá encuentros de fase de grupos y un duelo de octavos de final, lo que implica tareas en infraestructura, seguridad, accesibilidad, transporte, logística operativa y activaciones de ciudad, además del trabajo coordinado con FIFA y la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Para Nuevo León, el sorteo representa una jornada de visibilidad y contacto directo con los responsables globales del torneo. Es una instancia donde se confirman calendarios, rutas de logística y comunicación, así como los escenarios para la presentación de sedes ante las delegaciones internacionales.
La comitiva regiomontana participa en sesiones con organizadores, asistentes técnicos y autoridades del comité central del Mundial. También sostienen reuniones sobre operación urbana, protocolo, identidad de sede y responsabilidades estatales vinculadas a la hospitalidad y seguridad.
El evento marca un avance en la agenda de preparación rumbo a 2026, pues pone a Monterrey dentro de los espacios donde se define cómo funcionarán las sedes mexicanas. Con presencia política y directiva en el sorteo, Nuevo León continúa su ruta hacia el inicio de la Copa del Mundo, con el objetivo de garantizar una sede funcional, operativa y conectada con los estándares exigidos por FIFA.