Charlotte.- Por primera vez en su historia, Benfica venció al Bayern Múnich, y lo hizo con carácter y temple. Fue 1-0 en Nashville, con gol de Andreas Schjelderup al minuto 13, en una jugada iniciada por Ángel Di María, figura y alma del conjunto portugués.
Con el triunfo, Benfica cerró como líder de grupo, relegando al Bayern al segundo lugar y eliminando de paso a Boca Juniors. Con ello, al gigante alemán, Bayern Múnich le espera un hueso durísimo en Octavos de Final: Flamengo, la revelación del torneo, mientras que Benfica enfrentará al ganador entre Chelsea y ES Tunis en los octavos de final del Mundial de Clubes 2025.
Tras la última jornada del Grupo C, ambos equipos sellaron su clasificación, pero con destinos muy distintos en el cuadro final.
El equipo lisboeta nunca estuvo realmente en riesgo. Solo una derrota combinada con una goleada escandalosa de Boca Juniors ante Auckland City podía quitarle el pase, algo que nunca ocurrió. Benfica golpeó primero y después se replegó con inteligencia, sostenido por una actuación extraordinaria del arquero Anatoliy Trubin, quien fue clave en la segunda mitad.
El Bayern sorprendió al arrancar sin varios de sus titulares. Kompany dejó en la banca a Kane, Kimmich, Goretzka, Musiala y Olise, y cuando quiso revertir la historia, ya era tarde. Los cambios llegaron con desventaja y el equipo se estrelló contra una defensa bien plantada y un portero inspirado.
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A sus 37 años, Di María volvió a brillar. Dueño de cada pelota parada, generador de juego y referente absoluto, se despidió del fútbol europeo con una actuación a la altura de su legado, en la antesala de su regreso a Rosario Central.
Benfica escribió una página dorada y espera rival para Octavos de Final. Al Bayern, ahora, le espera su mayor reto: Flamengo.