Nueva York.- La polaca Iga Swiatek, actual número dos del ranking mundial, confirmó su gran momento en el circuito al derrotar este lunes a la rusa Ekaterina Alexandrova por 6-3 y 6-1 en la cuarta ronda del Abierto de Estados Unidos 2025. Con esta victoria, Swiatek se instala en los cuartos de final del último Grand Slam del año, una instancia que no alcanzaba en Nueva York desde su título en 2022.
La ganadora de seis torneos ‘grandes’, incluidos cuatro Roland Garros y un US Open, necesitó apenas una hora y cinco minutos para superar a Alexandrova, número 12 del mundo, en el Louis Armstrong Stadium. El duelo fue dominado por la polaca desde el inicio, con una actuación sólida al servicio y agresiva en los puntos de resto. Swiatek solo cedió una vez su saque y aprovechó los errores no forzados de su rival, quien lució nerviosa en su primera aparición en octavos de final del US Open.
Con este triunfo, Swiatek suma cinco victorias en siete enfrentamientos directos ante Alexandrova y continúa su camino hacia una hazaña histórica: convertirse en la primera tenista desde Serena Williams en 2012 en conquistar Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos en la misma temporada.
La polaca, de 24 años, también igualó una marca histórica al convertirse en la mujer más joven en alcanzar los cuartos de final en los cuatro torneos del Grand Slam en una misma temporada desde Maria Sharapova en 2005. “Estoy contenta con mi nivel y con la forma en que estoy manejando los partidos. Me siento en mi zona”, declaró Swiatek tras el encuentro.
En la siguiente ronda, Swiatek enfrentará a la ganadora del duelo entre la brasileña Beatriz Haddad Maia y la estadounidense Amanda Anisimova, en lo que promete ser otro reto de alto nivel.
La jornada femenina del lunes también incluye el esperado enfrentamiento entre Coco Gauff, campeona del US Open en 2023, y Naomi Osaka, doble ganadora del torneo en 2018 y 2020, lo que convierte esta fecha en una de las más atractivas del calendario del tenis mundial.
Swiatek sigue firme en su objetivo de cerrar el año como número uno del mundo y consolidarse como la gran figura del tenis femenino actual.