Italia.- Luka Modric volvió a marcar diferencia y con 40 años se convirtió en el héroe del AC Milan, anotando el único gol del triunfo 1-0 de su equipo contra Bolonia, mientras que el mexicano Santiago Giménez sigue con su sequía goleadora en Italia.
El mediocampista croata se estrenó como rossonero' este domingo en la tercera jornada de la Serie A, para firmar la primera victoria de su equipo en el campeonato en San Siro con un ajustado disparo a la base del poste desde fuera del área.
Lo celebró con la ilusión de un niño. San Siro se convirtió en una fiesta cuando Modric definió desde la frontal del área.
El runrún de la grada se escuchó desde que el astro croata comenzó su carrera en el centro del campo para llegar desde la segunda línea, indetectable para la defensa del Bolonia, mientras el estadio pedía a gritos a Saelemaekers que cediera el balón, barruntando ya el gol que pocos segundos después Modric hizo realidad.
Crédito: AC Milan
Cumplió un sueño. Porque Modric, leyenda del Real Madrid, campeón de todo a nivel de clubes, incluso del Balón de Oro, era seguidor del Milan cuando era pequeño. Culpa de Zvonimir Boban, su gran ídolo, croata como él y emblema del club que ahora representa.
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Pareció incluso quitarse un peso de encima, como si quisiera demostrar al milanismo su compromiso total, su disposición absoluta para devolver al club a la Liga de Campeones mientras persigue el objetivo de llegar al 100 por ciento al Mundial 2026.
El gol de Modric destrabó un partido cerrado para los rossoneri, que estaban vestidos de amarillo y tras el tanto del croata pudieron marcar más goles, pero el poste evitó los festejos Estupiñán, Ricci y Giménez.
“Santi” fue el más afectado, porque falló un gol cantado tras burlar al portero y estrellar su disparo en el larguero, aunque con poco ángulo, para seguir con su sequía en el Calcio, pese a que a media semana anotó un golazo para rescatar el empate 2-2 de México contra Corea del Sur.
Crédito: Agencia EFE
Giménez no pasa su mejor momento. Errático en muchas ocasiones, desaprovechó dos oportunidades de gol claras para sentenciar el duelo. Su nerviosismo le complicó el gol, pero la afición le reconfortó con una ovación cuando fue sustituido como muestra de confianza.
El delantero mexicano tiene la polvora mojada desde su doblete en mayo, precisamente contra Bolonia.
Con el triunfo de este domingo, el Milan es quinto de la Serie A con 6 puntos. Su próximo partido será el sábado contra el Udinese, que arrancó la temporada con un par de victorias y un empate.