Guadalupe.- Rayadas presentó oficialmente a su nueva entrenadora, Amandine Miquel, quien abrió su etapa en Monterrey con una declaración contundente: la Liga MX Femenil es, para ella, una de las mejores competencias del mundo, y esa es la razón por la que hoy está aquí.
“Para mí es una de las mejores ligas; si no fuera así, no estaría aquí. Vengo de Inglaterra, que considero la mejor junto con Estados Unidos, y creo que la liga mexicana no tiene nada que envidiarle a Francia o Alemania. Hay afición, se juega en estadios muy bonitos como este y el nivel se desarrolla muy rápido. Pienso que la Liga MX Femenil es muy buena”.
Durante su presentación, también tomó la palabra Eva Espejo, directora deportiva del club, quien respondió sobre la planeación del plantel y adelantó los ajustes que realizará la institución rumbo al próximo torneo.
“En el semestre anterior teníamos un plantel más amplio porque disputábamos dos torneos. Ahora habrá probablemente más bajas que altas, pero estamos priorizando la posición de central por izquierda y una incorporación ofensiva para completar nuestro ataque. Consideramos que tenemos un equipo competitivo, y en manos de Amandine se va a potenciar”.
Miquel —recién llegada tras un viaje de 20 horas— dejó claro el sello que quiere imprimir: orden defensivo con intención ofensiva basada en posesión con sentido.
“Defender bien es fundamental. No recibir goles es una base, y defender no es solo tarea de las defensas: todas deben hacerlo. Con la pelota, debemos tener intención. La posesión sirve para hacer goles, no para contar pases. Queremos una posesión eficiente que genere espacios, oportunidades y daño al rival”.
La entrenadora afirmó que ya seguía a Rayadas desde Europa y detectó un plantel con calidad, juventud y margen de evolución.
“Es una liga que he seguido desde hace un par de años. Vi partidos de Rayadas y encontré un potencial importante: jugadoras jóvenes pero con calidad. Pienso que se puede mejorar en todas partes; llevará un poco de tiempo, pero creo que se puede obtener un mejor rendimiento de esta plantilla”.
Recordó además su vínculo personal con el país: vivió en México de los seis a los doce años y comenzó a jugar futbol aquí, en Tecamaxalco.
“Viví en México desde los seis hasta los doce años. Empecé a jugar futbol aquí, en Tecamaxalco. Tengo recuerdos muy buenos de eso y siempre estuvo en mis proyectos regresar a este país y entrenar en esta liga”.
Finalmente, habló del entorno regio: una afición intensa, un estándar competitivo alto y un club que coincide con su visión de trabajo.
“Aquí se siente la intensidad de la afición. El equipo tiene una mentalidad de lucha y entrega que me corresponde mucho. Antes de la táctica, eso es lo mínimo: si no hay ganas ni enfoque mental, lo demás son detalles”.
Su objetivo, dijo, será reforzar esa mentalidad, hacer del equipo una versión impredecible y ofensiva, y devolverlo a las posiciones donde Rayadas debe estar —peleando arriba, compitiendo contra los mejores y regresando a protagonismo real en la tabla.
“Quiero reforzar esa mentalidad y empujarla un poco más. Tengo ideas para que Rayadas sea impredecible, difícil de jugar, capaz de hacer más goles y ser ofensiva. La temporada pasada no fue suficiente; este club debe pelear arriba y terminar lo más alto posible” .