Pionyang. – La crisis alimentaria que azota a Corea del Norte podría ser la excusa perfecta para que Kim Jong-Un, dictador de aquel país, lleve a cabo una purga entre funcionarios de alto nivel, donde habría fusilamientos de por medio, de acuerdo con el diario The Korea Times.
Este verano ha sido complicado para Corea del Norte meteorológicamente hablando, ya que las lluvias registradas han causado grandes daños a las tierras de cultivo, producto, entre otras cosas, del drenaje deficiente en las zonas.
La molestia ha invadido a Kim Jong-Un, quien ha lanzado fuertes críticas contra la gestión del primer ministro, Kim Tok-hun, que fue acusado como el “responsable” de haber “estropeado la economía nacional”.
Toda esta situación ha provocado que el líder supremo surcoreano reparta culpas de una posible hambruna a los altos mandos del gabinete, por lo que ordenó descubrir a los órganos responsables y las personas implicadas para “castigarlos severamente”.
“A juzgar por el grado de crítica y enojo de Kim Jong-Un expresado por los medios estatales de Corea del Norte, los responsables de la política económica bien podrían ser ejecutados o enviados a campos de prisioneros políticos”, pronosticó el analista Oh Gyeong-seob, del Instituto Coreano de National Unification.
El especialista aprovechó para hacer una comparación de lo que se vive hoy en Corea del Norte con la época de la Marcha del Sufrimiento, donde algunas reformas monetarias se quedaron cortas y sin el impacto esperado, lo que hizo que el país cayera en crisis y algunos funcionarios fueran ejecutados por el gobierno.
Corea del Norte, que es un país comunista, ha vivido años al borde de la hambruna, no obstante, en la actualidad, se estima que el suministro de alimentos en el país ha caído por debajo de la cantidad necesaria para satisfacer las necesidades mínimas del ser humano.
El pasado mes de enero de 2023 trascendió que Kim Jong-Un había ordenado una purga en su cúpula, de acuerdo con la prensa japonesa.
Se habla que fueron entre cuatro y cinco los políticos asesinados, uno de ellos Ri Yong-ho, quien negoció los acuerdos nucleares de Corea del Norte con Estados Unidos.