Viena.- La aerolínea suiza Swiss informó este lunes de la muerte de un miembro de su personal de cabina, ocurrida una semana después del aterrizaje de emergencia de uno de sus aviones en el aeropuerto de la ciudad austríaca de Graz.
"Estamos profundamente conmocionados por la muerte de nuestro estimado colega. Nuestros pensamientos están con los familiares, cuyo dolor debe ser inmenso. Haremos todo lo posible para apoyarlos en estos momentos tan difíciles", indicó el director de Swiss, Jens Fehlinger, en un comunicado.
El incidente ocurrió el 23 de diciembre, cuando se acumuló una gran cantidad de humo en la cabina del Airbus A220-300 que volaba de Búcarest a Zúrich con 74 pasajeros y cinco tripulantes a bordo.
Los pilotos decidieron realizar un aterrizaje de emergencia en Graz para garantizar la seguridad de los ocupantes.
Además de los dos pilotos y dos miembros de la tripulación, 13 pasajeros fueron trasladados a hospitales y la mayoría de los hospitalizados han sido ya dados de alta, mientras que el trabajador fallecido fue ingresado grave en cuidados intensivos.
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La aerolínea indicó que, de acuerdo con la información preliminar, la causa más probable del incidente fue un fallo técnico en uno de los motores.
Swiss señaló que se están realizando investigaciones y pidió comprensión hasta que se disponga de datos definitivos sobre lo sucedido.
La Fiscalía de Graz ha abierto una investigación para esclarecer las causas de lo sucedido y espera un informe de un perito aeronáutico para determinar los motivos de la fuerte acumulación de humo en la cabina.
Vive aviación semana trágica
Cabe recordar que la semana pasada se destacó por la incidencia de cinco accidentes aeronáuticos y un contratiempo en pleno vuelo, la mayoría de ellos apenas el pasado fin de semana.
El primero de ellos tuvo lugar en pleno 25 de Diciembre, en Kazajistán, cuando un vuelo Baku-Grozni, de AZAL (Azerbaiyán Airlines) cruzaba un espacio aéreo en el que ocurría un fuego cruzado entre drones de combate ucranianos y defensas antiaéreas rusas, que impactaron al avión comercial que cayó a tierra dejando un saldo de 38 muertos.
Al día siguiente (26 de diciembre), una avioneta tripulada por una pilota y su copiloto cayó al Mar Rojo, frente a la costa de los Emiratos Árabes Unidos. Ambos murieron.
Pero el accidente aéreo más trágico tuvo lugar el domingo 29 de diciembre (sábado 28, tiempo de México), cuando un avión de Jeju Air tuvo fallas con el tren de aterrizaje y derrapó con su fuselaje sobre la pista del aeropuerto de Muan, Corea del Sur hasta impactarse con el vallado del lugar y enseguida estallar. Murieron 179 de 181 personas.
Ese mismo sábado otros dos aviones tuvieron malos arrivos a sus destinos, uno de ellos fue la aeronave modelo De Havilland Canada Dash 8-400 de la aerolínea Air Canada, que al aterrizar en el aeropuerto de Halifax (este de Canadá), tuvo problemas con su tren de aterrizaje y se ladeó sobre su costado izquierdo. El otro fue un avión Boeing 737-800 de la aerolínea KLM, que derrapó y se salió de la pista del Aeropuerto Internacional de Oslo, Noruega, ante lo resbaladizo del pavimento por la presencia de lluvias. Ninguno de estos dos casos dejó muertos ni heridos.
También el sábado 28 de diciembre, un avión modelo A320 de la aerolínea Viva Aerobús tuvo problemas de despresurización en el vuelo 2220 de Cancún a Cd. Juárez, justo cuando sobrevolaba el Golfo de México, pero alcanzó a llegar al Aeropuerto Internacional de Monterrey, donde sus pasajeros llegaron a salvo para abordar otra aeronave.