Dan 10 años de cárcel al ‘Niño Buda’ por abuso a menores

El líder espiritual ganó fama en 2005 cuando se dijo que era capaz de meditar durante meses bajo un árbol sin comida, agua ni sueño.

Ram Bahadur Bomjan, buda de Nepal
Ram Bahadur Bomjan, buda de Nepal Créditos: Redes sociales
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Katmandú. -  Un tribunal de Nepal condenó este lunes a diez años de prisión al líder espiritual conocido como 'Budha Boy' o el niño buda, Ram Bahadur Bomjan, por un caso de abuso sexual infantil cometido hace casi diez años y del que fue declarado culpable la semana pasada.

El secretario del tribunal de distrito de Sarlahi, Sadan Adhikari, dijo a EFE que además de una pena de cárcel de 10 años, el controvertido líder espiritual fue multado con 500 mil rupias nepalíes (más de 3 mil 700 dólares, unos 3 mil 400 euros).

Bomjan está acusado de abusar sexualmente de una menor que residía como monja en su ermita en el poblado de Pattharkot en 2016, cuando esta tenía 15 años.

Apodado el niño buda puesto que muchos de sus seguidores creen que es una reencarnación de Buda, Bomjan fue arrestado el pasado enero en Katmandú tras casi cuatro años prófugo, después de que este mismo tribunal emitiera una orden de arresto contra él por los cargos de abuso sexual.

Ram Bahadur Bomjan siendo arrestado | Redes sociales 

Bomjan saltó a la fama en 2005 después de que sus seguidores aseguraran que el líder budista era capaz de meditar durante meses bajo un árbol en una jungla sin comida, agua ni sueño. Algunos popularizaron la creencia de que era una reencarnación de Gautama Buda, fundador del budismo, que alcanzó la iluminación bajo un árbol hace 2 mil 500 años.

Cientos de personas comenzaron a visitar el sitio para ver al 'Niño Buda' mientras sus seguidores establecían ermitas (santuarios) en diferentes poblados de Nepal. Sin embargo, la fama de Bomjan se vio empañada por las acusaciones de abuso sexual y desaparición de personas.

Cuatro familias distintas han presentado denuncias contra el controvertido líder espiritual acusándolo de asesinato, desaparición y explotación sexual de sus seguidores.

La Policía nepalí registró la desaparición de hasta cuatro personas en varias ermitas dirigidas por Bomjan entre 2011 y 2015.