Monterrey. - El Congreso del Estado aprobó este martes hacer obligatorio que los municipios cuenten con al menos un Centro de Control Canino y Felino, mejor conocidos como centros de bienestar animal, dejando atrás al viejo modelo de “perreras municipales”.
Los legisladores locales sometieron a votación la propuesta presentada por el coordinador de la bancada local del PAN, Carlos de la Fuente, en la que se reforman los artículos 11, 14 y 66 de la Ley de Protección y Bienestar Animal para la Sustentabilidad del Estado de Nuevo León a fin de que se cuente con un Centro de Control Canino y Felino en cada uno de los Municipios del Estado.
“Los animales están catalogados como animales sintientes, de acuerdo a una reciente reforma a la Ley de Protección y Bienestar Animal para la Sustentabilidad del Estado de Nuevo León, aprobada por la Legislatura LXXV del Congreso del Estado de Nuevo León”, comentó el diputado albiazul Eduardo Leal al dar lectura al dictamen.
Señaló que los animales de compañía, especialmente los perros y gatos comúnmente se adoptan como mascotas y constituyen una parte importante en las familias.
Afirmó que “el crear Centros de Control Canino y Felino, propiciara en los municipios una disminución en diversos rubros como, animales en la calle, animales abandonados, animales maltratados, animales desatendidos, la mitigación de enfermedades provocadas por parásitos y otros gérmenes, en contraste se brindara los programas de esterilización, de vacunación, de adopción, recuperación de animales extraviados, atención médica oportuna, entre otras cosas”.
El Estado en coordinación con los Municipios, tendrán dos años para dar cumplimiento a este decreto. El dictamen se aprobó por unanimidad.