Monterrey.- El PRI anunció que presentará una reforma a la Ley General de Educación para combatir prejuicios y tabúes en torno a la menstruación.
El Coordinador del GLPRI, Heriberto Treviño, señaló que la reforma pretende que las niñas y adolescentes tengan garantizado de forma gratuita el acceso a productos de higiene menstrual y así como la información al respecto, desde una perspectiva de género, objetiva, laica, científica y digna.
Con las Diputadas priístas, Treviño indicó que presentará la iniciativa de reforma a la Ley General de Educación.
En el escenario donde la menstruación sigue siendo un tema tabú en varios sectores de sociedad, los legisladores y legisladoras se mostraron con interés hacerlo este tema visible para atenderlo de manera integral y adecuada, con una visión de género apoyando a mujeres desde la pre adolescencia hasta la edad adulta.
“Es un tema muy sensible que amerita un cambio de enfoque en la sociedad, para que veamos a los productos de higiene menstrual como artículos de consumo básico, y así poder generar un verdadero cambio cultural y comercial, con el objetivo de combatir la desigualdad que genera este proceso biológico en las mujeres”, aseveró Treviño Cantú.
“En la bancada del PRI, particularmente nuestras Diputadas, vemos la necesidad de garantizar de forma gradual y progresiva el acceso gratuito a los productos de gestión menstrual para las mujeres, sobre todo en los planteles educativos de acuerdo con la suficiencia presupuestal de las autoridades”, expuso.
¿Qué artículos se modificarían?
El Coordinador del GLPRI adelantó que la iniciativa de reforma a la Ley General de Educación contempla modificar los artículos 9, 16 y 30, al considerar que es urgente terminar con la “pobreza menstrual”, al lamentar que, en pleno siglo XXI, haya mujeres sin acceso a productos de higiene menstrual, educación responsable, baños e instalaciones dignas, ni gestión adecuada de los desechos, además que las toallas femeninas están gravadas con impuestos.
La propuesta también alienta el cambio de contenidos en los planes de estudio, para que se incluya la educación menstrual dentro de la educación sexual integral y reproductiva, a fin de eliminar prejuicios y acabar con los tabúes que persisten en la sociedad.
“Los principales problemas que tiene que enfrentar una persona menstruante al no tener al alcance productos de higiene menstrual y una educación responsable, son el silencio, ausentismo escolar o laboral, así como infecciones o enfermedades que pueden prevenirse con un ‘cambio de chip’ sobre este tema”, dijo Treviño.