Monterrey.- Autoridades locales y federales alertan por un alza en robos relacionados con las casas de empeño, pues alrededor de donde se establecen se registra un aumento de este delito.
Esta situación obedece a que no existe una ley que regule su funcionamiento y permite a las personas empeñar objetos que pueden ser robados.
El senador por Nuevo León Víctor Fuentes aseguró que cuando fue alcalde del municipio de San Nicolás detectó que estos negocios operaban en la ilegalidad al aceptar prendas robadas.
“Urge una regulación local en materia de seguridad que exija medidas preventivas, sobre todo de identificar plenamente a quienes están acudiendo de manera recurrente a depositar a través del mecanismo de prenda los objetos que son sujetos de ser aceptados”, dijo.
El legislador señaló que, aunque se pueden regular desde el nivel federal por el tema financiero, los alcaldes y autoridades estatales también tienen la facultad de regularizarlas.
Por ejemplo, en el municipio de Pesquería la problemática escaló al grado que el Cabildo decidió en agosto pasado clausurar 14 de estos establecimientos, bajo el argumento de que carecían de permiso para operar.
“Podemos comprobar que en este tiempo que han estado clausurados hemos podido reducir la incidencia delictiva en los alrededores de estos puntos en donde estaban establecidos de este giro comercial”, señaló el alcalde Patricio Lozano.
Explicó que los delitos que registraron una disminución fue robo a casa habitación y robo a transeúnte.
Los funcionarios señalan que aunque existen mecanismos para detectar objetos robados, algunos establecimientos son laxos al aplicarlos. Joel Rodríguez, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Prendarios (Amespre), aseguró que en Nuevo León cuentan con convenios ante la Fiscalía de Justicia y la Secretaría de Seguridad Pública estatal para colaborar en reportes de robo, y están regulados por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
“Todos los aspectos de operación de una casa de empeño están en una ley federal, estatal y municipal respecto a las reglas de operación. La industria prendaria, la operación conocida como empeño, está perfecta y absolutamente regulado”.
Rodríguez señaló que durante 2019 las cerca de 4 mil casas que están agremiadas hicieron 61.1 millones de operaciones equivalentes a 73 mil millones de pesos en todo el país y aseguró que solo el .0002 por ciento estuvo relacionado con una investigación judicial.
En Nuevo León la asociación tiene 254 casas de empeño ligadas a la Amespre, pero en el Registro Público de Casas de Empeño de la Profeco señala que de las 8 mil 578 casas de empeño registradas, hay un total de 718 en la entidad. Actualmente, el Congreso estatal cuenta con una iniciativa presentada por Movimiento Ciudadano para crear la Ley para Regular las Casas de Empeño y evitar que acepten objetos robados.