Monterrey. - Trabajadores jubilados protestaron la mañana de este miércoles 18 de octubre a las afueras del Palacio de Gobierno, para exigir al Estado la realización de una auditoría externa a la Sección 50, al acusar malversación de fondos.
El grupo de casi 100 inconformes también presentará una denuncia contra los responsables del servicio médico de la Sección 50, para que restituyan el diseño malversado ante la Fiscalía Anticorrupción, según dijo la maestra Lucinda Pérez, representante de los maestros.
Se habla que parte de las afectaciones registradas son un monto de 179 millones de pesos que se habrían destinado al servicio médico del magisterio, el cual, remarcaron, es deficiente en la atención, así como en el abasto de medicamentos, apuntó el maestro Abel Villarreal.
“Vamos a pedir la auditoría y esa auditoría va a dar resultados que sean públicos, si no para qué sirven, y estamos preparando la demanda de hechos y la denuncia para esclarecer si existen responsables, que sean susceptibles de ser castigados y que pague con la restitución de los dineros o si hay consignación penal que se haga.
“No sabemos en qué se ha gastado esas cantidades no hay informes son secretos que se manejan entre el Isssteleon y la sección 50 y sale que tienen contratos con familiares, no es posible que esto siga ocurriendo, y no sabemos si se entregan los insumos o lo que estén comprando además de hacer contratos con empresas fantasmas”, manifestó Villarreal.
Señalaron que, con adjudicaciones directas de contratos sin controles, la Sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en Nuevo León ha desviado al menos 121 millones de pesos que recibió del erario estatal a dos empresas propiedad del hijo del dirigente nacional magisterial.
La maestra Teresa Flores indicó que los maestros coinciden en exigir la renuncia del líder sindical, y que los recursos se presentarán ante la Fiscalía Anticorrupción, al estar afectados 27 mil agremiados por las fallas del servicio médico.
Estas irregularidades se habrían presentado en los periodos de los dirigentes estatales José Luis López Rosas y Juan José Gutiérrez, donde este último ocupa todavía el cargo, y ha sido señalado de ser impuesto por Alfonso Cepeda Salas quien desde el 2018 encabeza el SNTE a nivel nacional.