Monterrey. - El Congreso del Estado vivió una nueva controversia este martes 5 de diciembre, pues las bancadas del PRI y PAN intentaron aprobar el cambio de sesiones de lugar a fin de preservar la seguridad.
El asunto se desechó al no tener la mayoría calificada con 21 votos a favor, 10 en contra y tres abstenciones. Este mismo buscaba restringir el acceso de personas externas al edificio oficial hasta la clausura del primer periodo ordinario de sesiones del tercer año legislativo, según el acuerdo leído por el panista Mauro Guerra, presidente del Congreso.
“La 76 Legislatura del Congreso del Estado, en cualquier momento, y en atención al contexto de seguridad indispensable para el adecuado desarrollo de las actividades legislativas, se aprueba a la presidencia para determinar en cada caso cambiar la sede del recinto oficial.
Se determina que el acceso al recinto oficial estará reservado exclusivamente para las personas integrantes de la 76 Legislatura, personal al servicio de los órganos del Poder Legislativo, grupos legislativos debidamente acreditados y representantes de medios de comunicación”, expuso Guerra.
En la exposición de motivos, Mauro Guerra recordó cómo en la semana pasada irrumpieron ciudadanos hasta el pleno de sesiones, lo que mantiene preocupado al personal del lugar.
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Al hablar en contra, Iraís Reyes, diputada de Movimiento Ciudadano, dijo que el asunto votado es ilegal porque no especifica qué otra sede se sugiere, ni para qué fecha, y que es una decisión que solo se vota en temas específicos.
“El hecho de darles apertura, estaríamos violando el artículo 82 de la Constitución y señala que aquí es la sede del Congreso”, alegó.
Waldo Fernández, coordinador de la bancada de Morena, alzó la voz en su intervención y comentó que no se moverá de la sede para no mandar un mensaje negativo a la población de inseguridad e incapacidad de resguardar el edificio.
“Si se requiere utilizar la fuerza pública para imponer el orden, se tiene que utilizar, pero yo no pienso irme de este recinto porque vienen unos inadaptados o unos locos. (…) Avergüéncense los responsables de esa pachanga, de venir este congreso a amancillarlo, pero yo no me voy a ir de este Congreso”, exclamó.
En los artículos transitorios del decreto, se le otorga inviolabilidad al recinto al que se cambie para llevar a cabo una sesión y, con ello, no podrá entrar ninguna fuerza pública.
También ordenan que se difundan las imágenes de las personas que fueron captadas en los disturbios del miércoles 29 de noviembre. En tanto, se indicaba amonestar a un diputado si perturbaba el orden de la sesión y, de ser necesario, aplicar expulsión.