Monterrey.- Diariamente, en el cruce de la Av. Pino Suárez con Av. Francisco I. Madero donde está situado el monumento del arco de independencia, es afectado por el constante flujo de toda clase de vehículos.
Desde hace muchos años la saturación de autos en la ciudad llegó a un punto en que tienen que transitar por debajo del monumento del arco, que con el paso del tiempo ha resultado muy dañado.
Por ello, el municipio de Monterrey, arrancó con trabajos de rehabilitación alrededor de la rotonda, instalación de áreas verdes, además de la cancelación de la circulación vehicular por debajo del monumento.
Mediante un render enviado por el ayuntamiento regio, se puede observar la colocación de barrotes alrededor del arco, recorte de banquetas que permitirán seis carriles en la circulación hacia el sur de Pino Suárez.
“Se cancelará la circulación vial por debajo del arco, pero al concluir el proyecto se mantendrán seis carriles en la circulación hacia el sur de Pino Suárez: tres carriles a cada lado del arco y las banquetas se recortan en los lados para permitir los seis carriles”, indicó el departamento de comunicación social
Con este cambio, lo que se propone es evitar maltratar el arco y darle el valor cultural que merece.
En lo que a la estructura del Arco de la Independencia respecta, se trata de una obra construida en 1910 como parte de los festejos de la independencia de México, que consta de un arco simple de 25 metros de altura con una piedra de cantera rosa.
Sin embargo, el smog del tráfico vehicular lo ha oscurecido, dándole su actual tono café oscuro.
En ese entonces el proyecto estuvo a cargo del Arquitecto inglés Alfredo Giles, quién además edificó el Casino Monterrey y el edificio del Banco Mercantil.
Por su parte, el arquitecto Pedro Cabral fue el encargado de la construcción del monumento.
Tanto el arco como las calzadas de Unión y Progreso -actualmente Madero y Pino Suárez-, esta última avenida principal de aquellos tiempos, fueron parte de un proyecto para embellecer la ciudad de Monterrey