Monterrey.- La emisión de partículas contaminantes en Nuevo León crecerá más de un 40 por ciento si no se realizan acciones para reducirlas, reveló la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León.
En rueda de prensa, Alfonso Martínez Muñoz, secretario de Medio Ambiente, y Armandina Valdez, directora de la Agencia de la Calidad del Aire, urgieron a todos los sectores, tanto el industrial y a la ciudadanía, a sumar esfuerzos contra la contaminación ambiental.
En la presentación del Plan Integral de Gestión de Calidad del Aire (PIGECA), estiman reducir las emisiones contaminantes de la ciudad de Monterrey hasta un 77 por ciento durante los próximos 10 años.
“Es un momento crucial para el área metropolitana de Monterrey y para Nuevo León, un tiempo para liderar con el ejemplo en el entorno nacional e internacional, demostrando que el progreso económico y el medio ambiente pueden avanzar juntos”, manifestó Martínez Muñoz.
El titular de la dependencia estatal aseguró que 82 empresas ya se han sumado a reducir las emisiones contaminantes en el Estado, con una inversión de 610 millones de pesos, pero cada vez se adhieren más.
Armandina Valdez presentó el inventario de las fuentes emisoras en la zona metropolitana e informó que el dióxido de azufre es el principal contaminante expedido por la refinería de Pemex en Cadereyta, y tiene la mayor expectativa de reducción en 10 años.
En las partículas PM2.5 y el óxido de nitrógeno se estableció buscar una reducción de 55 por ciento y para compuestos orgánicos volátiles, un 41 por ciento.
En el análisis que hizo el gobierno estatal, también se identificó que la refinería de Pemex en Cadereyta, tuvo eventos de emisiones con impacto contaminante en la zona metropolitana de Monterrey y que hasta ahora la empresa paraestatal no se ha integrado al PIGECA.
Alfonso Martínez Muñoz señaló que para disminuir las emisiones contaminantes de la refinería deben invertir en la planta y están en comunicación con las autoridades federales para lograr un acuerdo.
“En el caso de la refinería, sabemos exactamente lo que se tiene que hacer, lo cual es la inversión en plantas desulfuradoras, la inversión y mantenimiento de las mismas.
“Seguimos en conversaciones con ellos, con la Agencia de Seguridad en Energía y Ambiente (ASEA), con la Semarnat y queremos ayudarle a la refinería para que les aprueben esa inversión que les permita reducir las emisiones”, manifestó.