Monterrey. - La avenida Ruiz Cortines es la vialidad más extensa de la ciudad, con 33 kilómetros, pero lejos de ser una solución de movilidad al conectar cinco municipios, es el más grande corredor de problemas urbanos.
Comenzando con baches desde la intersección Lincoln en Monterrey hasta el crucero Dulces Nombres en Juárez, situación que también se presenta en el tramo de Guadalupe y en el de San Nicolás, a pesar de que ahí la avenida mide menos de un kilómetro.
Además, banquetas en mal estado, registros sin tapa, semáforos mal sincronizados, falta de señalización en cruces peatonales, nomenclaturas tapadas y basura son una presencia constante.
En Monterrey, gobernado por el emecista Luis Donaldo Colosio, la avenida Ruiz Cortines mide 15 kilómetros y hacia el poniente se observan daños en el asfalto a la altura de las colonias Cumbres del Sol y Cumbres San Agustín.
Cerca de los cruces con Guerrero, Félix U. Gómez y Churubusco, el asfalto tiene grietas y las banquetas están obstaculizadas por maleza y basura.
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En los 900 metros que corresponden al municipio de San Nicolás, cuyo alcalde es el panista Daniel Carrillo, el tramo que va de Churubusco a Las Américas, el asfalto está plagado de baches.
Mientras que, en Guadalupe, donde la alcaldesa es la priista Cristina Díaz, el corredor es de casi 10 kilómetros y comparte otros cuatro kilómetros con Apodaca.
Luego, este municipio, que gobierna el priista César Garza, tiene un kilómetro propio y los dos últimos kilómetros, cerca del crucero con Dulces Nombres, corresponden a Juárez, cuyo alcalde es el también priista Francisco Treviño.
A pesar de pertenecer al mismo partido, los ediles no han logrado acuerdos para mejorar el área, como la ampliación del corredor Dulces Nombres, obra presupuestada en 400 millones de pesos y tienen medio año de retraso debido a la falta de acuerdos con la administración estatal de Samuel García.
Este no es el único proyecto fallido, pues en agosto de 2011, el entonces gobernador priista Rodrigo Medina proyectó mejoras a Ruiz Cortines con la Ecovía, un proyecto de transporte de mil 637 millones de pesos.
Vicente Reyes, un taxista que opera fuera de un centro comercial en Valle Soleado, en Guadalupe, dijo calcular que a diario auxilia cuando menos a una decena de automovilistas en la zona debido a ponchaduras de llantas.
“Todos los días (veo) ponchaduras de carros, todos los días de unos 10 carros en Ruiz Cortines. Está mal el pavimento, arreglan y se vuelven a hacer los pozos otra vez”, dijo.
Para el diputado local de Morena, Waldo Fernández, es necesario reactivar un fondo como parte del presupuesto federal y que sea exclusivo para el bacheo.
“Fue quitado porque desviaban los recursos, eran fondos para el bacheo en las metrópolis y en Nuevo León llegaba el dinero y se los gastan en otra cosa (...) debe haber reglas de operación estrictas”, dijo Fernández.
Para la diputada priista Perla Villarreal, los alcaldes les deben lograr acuerdos mutuos junto con el Estado.
“Los municipios por donde atraviesa se deben coordinar y establecer un plan de acción en conjunto con el Estado, para remodelar toda la avenida, señalamientos, semáforos y la pavimentación”, señaló la priista.