Monterrey.- El diputado Mauro Guerra Villarreal junto a integrantes de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) en el Congreso de Nuevo León anunciaron una iniciativa de reforma para la gestión sostenible de residuos orgánicos en las escuelas del estado.
Lo anterior se propone a través de una reforma a la Ley de Educación del Estado que busca añadir una nueva fracción XI BIS al artículo 7.
Con esta reforma se busca fomentar la responsabilidad ecológica desde los primeros niveles educativos.
Dentro de la actual Ley de Educación del Estado la fracción I. XI aparece “sin correlativo”, por lo que la propuesta indica la siguiente adición:
“Promover la generación responsable, la gestión adecuada y el aprovechamiento de residuos orgánicos en todos los niveles educativos, mediante la implementación de acciones integrales y sostenibles”.
Esta reforma parte de la necesidad de abordar el problema de los residuos orgánicos que representan aproximadamente el 50 por ciento de los desechos sólidos urbanos en México y que contribuyen de manera significativa al cambio climático al generar gases de efecto invernadero.
Se pretende, además, evitar que este tipo de desechos terminen en vertederos o rellenos sanitarios, por lo que se deberá promover “la generación responsable y el aprovechamiento de residuos orgánicos a través de prácticas sostenibles en las escuelas”, se detalló en el informe.
De acuerdo con los legisladores, mediante programas de separación y compostaje las instituciones educativas pueden transformar un problema ambiental en una oportunidad de aprendizaje. Con la implementación de estas prácticas se puede lograr una disminución de la cantidad de desechos enviados a los vertederos promoviendo a su vez, la agricultura urbana con huertos escolares.
El diputado aseguró que las escuelas son espacios estratégicos no sólo para la enseñanza académica, “son también espacios de formación en valores y conductas que trascienden hacia el ámbito familiar y social que, al implementar programas de compostaje y reducción de residuos orgánicos, se puede reducir la carga ambiental y fortalecer el sentido de responsabilidad ecológica”, detalló.
Además, indicó que integrar estas actividades en el currículum escolar asegura un conocimiento en temas relevantes como la biología, economía circular y el ciclo de nutrientes, conocimientos que ayudan a los estudiantes a comprender el impacto que tienen sus comportamientos ante el medio ambiente.
Aseguró que los huertos escolares pueden generar una conexión entre los planteles y la comunidad, donde el alumnado puede convertirse en agente de cambio tras llevar estas prácticas a sus hogares.
Finalmente, en el comunicado se detalló que la iniciativa se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible que marca la ONU, específicamente el objetivo 12 (Producción y Consumo Responsables) y el objetivo 13 (Acción por el Clima).