Monterrey.- Los alcaldes Luis Donaldo Colosio y Daniel Carrillo solicitaron una reingeniería de rutas por quejas de vecinos sobre la eliminación de unidades como parte de la reestructuración del transporte público.
La problemática de los usuarios es que su tiempo de traslado se retrasa debido a la falta de rutas, y esto es complicado para los adultos mayores del municipio, ya que tienen que caminar cuatro o cinco veces más.
Daniel Carrillo, alcalde de San Nicolás, manifestó que las colonias con esta problemática en San Nicolás son Industrias del Vidrio, Villas del Oriente, Hacienda Los Morales, Los Morales y El Mezquital.
“Quitaron rutas alimentadoras y hoy los vecinos y vecinas tienen que caminar cerca de cuatro o cinco veces más de lo que tenían que hacerlo antes.
“No es por una cuestión de no querer pagar sino que la población, en su mayoría adultos mayores, se hace más complicado poder llegar a estas zonas de transferencia”, agregó el edil panista.
Carrillo aseguró que no hay camiones en toda la zona oriente del municipio nicolaíta, y que el modelo estatal que plantearon era bueno pero la ejecución no funcionó.
“No hay camiones en San Nicolás en la zona oriente, está abandonada en materia de transporte público. El modelo que plantearon como proyecto era bueno pero la ejecución ha sido un fracaso”, señaló.
En ese sentido, Luis Donaldo Colosio, alcalde de Monterrey, coincidió con su homólogo de que hay colonias en las que los vecinos del sector sufren por la falta de rutas urbanas.
“Hay muchas pegadas al municipio de San Nicolás, donde a través de los años se han eliminado las rutas que le daban servicio a muchas de esas colonias. Tienen que desplazarse por largas distancias para poder acceder a otras rutas que les puedan ayudar a llegar a su destino.
“Esto evidencia que el trazado de rutas actual ya está completamente desactualizado, no es funcional y no les sirve como buen propósito de movilidad a la gente de la metrópoli, entonces si realmente se debe de entrar en una reingeniería de todas las rutas”, argumentó.
Agregó que es un proceso complejo porque los concesionarios se sienten dueños de sus rutas cuando no lo son.