Monterrey.- Todo iba bien en la vida de Sebastián, hasta que en una visita al médico tras la aparición de unos gangleos resultó en un inesperado y duro diagnóstico. Con tan solo 5 años, al pequeño se le detectó leucemia linfoblástica aguda, el pasado 19 de febrero.
Previo al diagnóstico, el médico le realizó diversos estudios tras detectar algo fuera de lo normal en el menor y al practicarle una biopsia, el resultado dio positivo, cambiando radicalmente sus vidas.
“A mi cuando me dijeron, yo sentí que se me cayó el mundo, la sangre hasta el piso, yo me agarré a llorar, fue muy duro como mama y no solo es cuando recibes la noticia, sino todos los días cuando vas al hospital”, Karla Patricia Armijo González, mamá de Sebastián.
Desde entonces, han sido dos meses de lucha para solventar los gastos de su enfermedad, en la que incluso fue necesario vender el automóvil familiar, ya que el tratamiento de Sebastián, durará mínimo tres años.
A lo largo de este complicado camino, Sebastián y su familia han encontrado apoyo en sus médicos que los animan a seguir adelante y con su ayuda lograron ingresar al programa de Cobertura Universal Contra el Cáncer Infantil del Gobierno del Estado de Nuevo León, donde recibe quimioterapias, tratamiento psicológico y medicamentos sin ningún costo en el Hospital Universitario.
“Este programa nos ha apoyado la verdad mucho en que todos los estudios, internamientos, procedimientos y las quimioterapias que se la han hecho al niño sean totalmente sin costo y hasta ahorita no he tenido que pagar nada, la Secretaría de Salud si ha estado muy al pendiente del caso”, explico.
Sin embargo, en algunas ocasiones la situación se complica debido a que los medicamentos se agotan y tienen que conseguirlos en hospitales privados y farmacias, pero tienen un costo de hasta 3 mil pesos.
Lo que los lleva a momentos difíciles, ya que los padres de Sebastián no cuentan con un empleo y algunos medicamentos los tiene que tomar hasta dos veces al día.
Aunque Sebastián no comprende el grado de su enfermedad, le da la fuerza a su madre de seguir adelante por su enorme valor ante los agotadores tratamientos de hasta cuatro veces por semana, que en ocasiones le causan mucho dolor.
“Son tratamientos en los que uno que no está en este proceso, no se imagina el hecho de ver a un niño como está dentro, que está con sus catéteres, que le están pasando medicamento y a veces, es doloroso para ellos y yo como mama tener que hacerme la fuerte con él y a veces me dice: no mamá que no me lo hagan y es abrazarlo fuerte y agarrarlo porque se lo tienen que hacer, es la vida de mi hijo”, indicó.
Aunque el futuro está lleno de incertidumbre, esta familia se mantiene unida y cada día es una lucha, un nuevo comienzo, para hacer la vida de Sebastián plena y feliz.
Para informes o apoyos a Sebastián:
Karla Patricia Armijo González / Teléfono: 81 22 90 98 70