Guadalupe.- Al candidato a la alcaldía de Guadalupe por la coalición Fuerza y Corazón X Nuevo León, José Luis Garza Ochoa, desde niño le inculcaron la cultura del esfuerzo y en caso de ganar la elección, su principal trabajo será la reparación de baches para elevar el valor de las propiedades.
¿Cómo te diste cuenta que te interesaba la política?
Soy de la idea que prefiero ayudar, a tener que pedir ayuda, es como una filosofía de vida. A los 14 años fue, por decirlo de alguna manera, en la campaña del licenciado Carlos Salinas, mi primer encuentro con la política, entregando volantes. Estaba en casa de mi abuela Eugenia, y un día pasó alguien ahí y le dije “yo quiero ayudar en la política”, y me dio un bonche de volantes y me fui a entregarlos casa por casa.
¿Cuál es tu motivación para servir a la ciudadanía?
Me lastima enormemente ver gente cuando están parados, esperando un camión, con este calor o la lluvia o el frío, y en casa nunca nos quedamos sin comer, pero supimos lo que es batallarle, y me puede enormemente la gente, es algo que lo traigo, que le aprendí a mi mamá y eso es un gran motivo, poderles dejar un mejor lugar.
¿Tu primer trabajo?
Mi madre hacía empanadas deliciosas de cajeta, también un tiempo vendimos manzanas casa por casa. A los 17 años llegué al ISSSTE y luego estuve en la Conasupo, siempre trabajando.
¿Un buen recuerdo de tu adolescencia?
Un funcionario público, no sé si era coordinador de Agentes del Ministerio, le comentan que si tenía un joven que pudiera ser abogado y dice “hay ahí un recién egresado”, y aunque yo iba en cuarto semestre de la carrera, pero me invitan como director jurídico, no podía firmar, pero hacía todo el trabajo.
¿Tienes algún miedo?
Temor a Dios definitivamente, pero no le tengo miedo a nada, al contrario, siempre la adversidad me hace estar listo. Miedo a las enfermedades, pero no puedo vivir con eso siempre.
¿La última vez que lloraste por sentir miedo, impotencia?
Cuando murió el hermano de mi mamá por cómo vi a mi mamá, además a mí me toca darle la noticia, y entonces me habla su hijo y me dice que su papá había fallecido, pero me lo dice así y ¡madres!, pues cómo ¿a ver, qué pasó? y fue en un accidente.
¿Una cosa que te guste hacer cuando tienes tiempo para ti?
Me encanta la pesca. He ido con mis hijos al río La Silla, hemos sacado más de 30 mojarras. Me gusta mucho jugar dominó, y nunca tomé hasta los 42 años y tengo 50, entonces tengo mi hígado nuevecito, si me puedo echar unos tequilas con buena música también.
¿Un libro favorito?
El de (Ryszard) Kapuscinski, el de “Ébano”, es un gran libro que les va a dejar muchas enseñas, es un escritor polaco y si empiezas a leerlo, te vas a enganchar, pero también un buen libro “¿En Qué Creen Los Que No Creen?”, de Umberto Eco.
¿Tu principal propuesta de campaña?
Un Guadalupe sin baches. No da para más la ciudad, está deprimida, está triste, hoy las propiedades valen menos. Guadalupe tiene 22 millones de metros cuadrados de bache y estiman que 6 millones están maltratados y entonces no es en una sola área, es un pavimento muy viejo, es un pavimento antiguo, a la mejor tiene más de 40 años en algunos lugares y además una baja inversión.
¿Los tres puntos que más le duelen al municipio?
Número uno, Guadalupe sin baches; número dos, Guadalupe seguro y en paz; número tres, definitivamente, que convertiré a Guadalupe en la ciudad de la salud, y además tendremos un centro de bienestar animal.
¿Qué es lo primero que cambiarías en el municipio?
Hay que llegar primero, ahí les encargo el voto el 2 de junio, hay que salir de manera masiva votar y fíjate, Fresnillo, Zacatecas, que está sólo a 380 kilómetros de aquí hoy es la ciudad más insegura el mundo y el común denominador es que gobierna Morena, hay que cerrarle el paso a Morena