Monterrey. – Un nuevo frente frío fuera de temporada ocasionará cambios significativos en el clima de Nuevo León, que esta semana podría recibir más caída de lluvia y no solo eso, sino también un índice de temperaturas agradables.
A través de un comunicado, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) publicó que para este lunes, nuestra entidad podría recibir lluvias muy fuertes que oscilarán entre los 50 y 75 milímetros.
Este es un tema a tomar con precaución, y es que el propio SMN advirtió que las precipitaciones de mayor intensidad podrían generar deslaves, incremento en niveles de ríos y arroyos, así como desbordamientos e inundaciones en zonas bajas, por lo que recomienda acatar todas las recomendaciones de las autoridades.
Protección Civil de Nuevo León complementó que el porcentaje de probabilidad de que se refleje este escenario meteorológico es del 30 por ciento, aunado a que las temperatura máxima sería de aproximadamente 34° centígrados.
El resto de la semana sería algo similar, con la diferencia de que habría aun más probabilidades de lluvia.
Además de la lluvia, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) detectó posibilidad para que se originen rachas de viento de 60 a 80 kilómetros por hora y condiciones para la formación de torbellinos o tornados para Nuevo León, y también para los estados de Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas.
“Las condiciones serán generadas por las ondas tropicales números 12 y 13, canales de baja extendidos sobre diferentes regiones de la República Mexicana, una zona de baja presión con probabilidad para desarrollo ciclónico al sur de Guerrero y Michoacán, el monzón mexicano, un sistema frontal fuera de temporada el cual se extenderá cerca de la frontera norte del país, inestabilidad en niveles altos de la atmósfera y el ingreso de humedad proveniente del golfo de México”, se lee en el comunicado.
Se detalló que dicha zona de baja presión tiene un 10 por ciento de probabilidad de desarrollo ciclónico en los pronósticos a 48 horas y a siete días.
Además especificó que esta mañana de lunes, se localizó aproximadamente a 605 kilómetros al sur-suroeste de Acapulco, Guerrero, con un lento desplazamiento lentamente hacia el oeste-noroeste.