Monterrey.- El senador electo de Nuevo León por el partido Morena, Waldo Fernández, le dio la bienvenida a Tomás Montoya, quien será diputado plurinominal en el Congreso local.
Durante el evento en un acto público en el municipio de Guadalupe, Fernández destacó que Montoya fue clave en el triunfo de él y Judith Díaz en el Senado.
Además de expresar que la coalición “sigamos haciendo historia en Nuevo León”, recibe a gente honesta y favorable.
“Guadalupe fue clave para triunfar en el Senado. El trabajo y esfuerzo que ustedes hicieron junto con otros compañeros nos puso donde estamos ahora, en un resultado histórico para Nuevo León, donde decían que la cuarta transformación no llegaba” comentó el senador.
Agregó que gracias al trabajo de Montoya y de todo el equipo de Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo, el movimiento se benefició con los votos de los ciudadanos de Guadalupe.
El senador celebró que Montoya vaya a tomar una curul en el Congreso del Estado, donde le dio a conocer la responsabilidad que lleva de poner la cuarta transformación en alto, y mencionó que los legisladores representan a la gente.
“Los alcaldes tienen una franja de territorio, pero los legisladores tienen que estar en contacto con la gente, pero hoy públicamente para los efectos pertinentes, te doy la bienvenida a Morena, eres un hombre decente, un hombre que sabe trabajar en equipo y que sobre todo supiste poner tus ambiciones legítimas de participación política en beneficio de la gente para que llegara a Nuevo León la cuarta transformación. Bienvenido, Tomás”, dijo.
Así mismo enfatizó que Morena es un movimiento que se reinventa y está formado por personas que aportan ideas novedosas a la coalición todos los días.
“Nuestro movimiento es un movimiento vivo, es un movimiento que todos los días se reinventa, es un movimiento que tiene que aprender a convivir con la gente buena que se incluye al movimiento", dijo.
Fernández calificó a Montoya como un hombre decente, trabajador y que supo poner la llegada de la cuarta transformación a Guadalupe antes que a sus ambiciones legítimas de participación política.