San Pedro.- La casa donde se realizó una fiesta clandestina el fin de semana, en San Pedro, que terminó con 11 personas detenidas y la localización de alrededor de 350 menores consumiendo alcohol, era rentada, informó el alcalde Mauricio Farah.
En el arranque del operativo “Navidad Segura y en Paz 2025”, el munícipe explicó que la movilización se originó tras múltiples reportes vecinales que alertaron a la corporación municipal sobre una concentración inusual de jóvenes, ruido excesivo y presunta venta de alcohol.
Asimismo, Farah dio a conocer que el inmueble era una casa antigua de entre mil y mil 200 metros cuadrados, la cual fue rentada para el evento.
“Recibimos muchas llamadas de vecinos que estaban reportando este evento. Argumentaban en un inicio que era una fiesta privada, pero después hubo otro tipo de reportes y fue cuando ya incluso el mismo secretario acudió personalmente.
“Durante el operativo nos dimos cuenta de que era una fiesta donde había menores de edad, alcohol, música y mucho relajo; obviamente clandestina, porque se estaba cobrando una entrada. Sé que es una casa en renta; el propietario está por pasarme el dato. Es una casa vieja, no abandonada, pero sí de varios años”, dijo.
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Ante la situación, la autoridad procedió a clausurar el evento, detener a los responsables y resguardar a los menores presentes.
El alcalde hizo un llamado a los padres de familia a mantenerse atentos ante este tipo de reuniones, especialmente durante la temporada decembrina.
“Pedirles a los padres de familia que estemos muy alertas sobre dónde están nuestros hijos, a dónde van y que, si ven alguna de estas actividades, lo denuncien, lo reporten al C4 para que nosotros podamos acudir”, mencionó.
La detención de las 11 personas y la localización de los menores de edad en la fiesta clandestina ocurrió durante un operativo realizado por autoridades municipales que se extendió de la noche del sábado a la madrugada de este domingo 30 de noviembre. Los hechos sucedieron en la calle Río Mónaco, en la colonia San Patricio.
Durante la inspección, algunos de los jóvenes se encontraban desorientados y sin medios para contactar a sus familiares, lo que obligó a su resguardo inmediato por parte de los cuerpos de seguridad.
En el sitio se aseguraron decenas de botellas de alcohol, sustancias con características similares a las de alguna droga, un arma corta calibre 9 milímetros, equipos de radiocomunicación, básculas, cascos balísticos y más de 100 mil pesos en efectivo, entre otros objetos que quedaron a disposición del Ministerio Público como indicios de posibles delitos adicionales.