Monterrey.- Las gasolineras con precios demasiado bajos podrían estar relacionadas con el suministro irregular de combustible, conocido como huachicol, acusó Alejandro Montufar, director de la consultora PetroIntelligence.
Por ello, de acuerdo con el especialista, los castigos y señalamientos de la Profeco a 37 gasolineras caras de Nuevo León incentivan la compra de combustible irregular y ponen en riesgo el trabajo de la Fiscalía General de la República, en vez de generar un mercado eficiente.
La clave para identificar a las estaciones de servicio que probablemente venden combustible irregular, agregó Montufar, es fijarse en los márgenes de ganancia por litro.
En Monterrey, por ejemplo, la Procuraduría que encabeza Iván Escalante dio el visto bueno a una gasolinera Pemex ubicada en Avenida Astros #701, la cual tenía una ganancia de únicamente 68 centavos por litro de gasolina regular el pasado 6 de enero, y tan sólo para cumplir con las regulaciones federales se requiere desembolsar cuarenta centavos.
“La información de la Profeco está generando distorsiones, más allá de hacer un mercado más eficiente. Hay estaciones de servicio con precios muy bajos, que tienen márgenes negativos, de 55 centavos, que son irreales.
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“Para dar cumplimiento a la regulación federal necesitas cuarenta centavos por litro, más las regulaciones estatales. La misma Profeco ha dado a conocer márgenes de ganancia muy bajos, que seguramente están relacionados con el suministro irregular.
“Sabemos que el 30 por ciento del combustible demandado en el país es de contrabando y, por supuesto, que tú señales de manera positiva a las estaciones con precios bajos, estás incentivando el consumo ahí, lo que va en contra de todos los esfuerzos de la Fiscalía General de la República”, dijo Montufar.
En enero, la gasolina regular en Nuevo León fue hasta nueve por ciento más cara que en el resto del país, pero, señaló el experto, esto se debe a que marcas como Oxxo Gas y Petro Seven no compiten por precios, sino por imagen y marketing, y los regios están dispuestos a pagar por ello.
“Este tipo de marcas venden Pemex, o sea, tienen su propia imagen comercial, pero la marca de combustible es Pemex, y venden más caro. Una Oxxo Gas o una Petro Seven cobran más y es el mismo producto, pero el consumidor quiere comprar ahí”, agregó Montufar.